La experiencia de Thiago Tirante, un tenista argentino de 24 años, en el aeropuerto de Cancún ha dejado una marca negativa en su relación con México, un país donde ha cosechado éxitos en múltiples torneos. Tirante, actualmente clasificado en el puesto 135 del ranking mundial, se encuentra participando en el Challenger 125 de Cancún, pero su llegada estuvo marcada por un incidente que él califica de corrupción y abuso de autoridad.
Al aterrizar, el tenista fue separado de sus pertenencias para una revisión. Durante este proceso, los agentes de aduanas encontraron varios rollos de cuerdas para raqueta, esenciales para su desempeño profesional. Según Tirante, al explicar que estos elementos eran parte de su equipamiento laboral, recibió la sorprendente respuesta de que no eran considerados como bienes personales. Esta categorización lo obligó a enfrentarse a un supuesto “impuesto” del 19% sobre el valor de las cuerdas.
“Cuando pedí que me mostraran la ley que justificara este cobro, me dijeron que si no pagaba, retendrían mi pasaporte”, relató Tirante, quien se sintió amenazado y sin opciones. La situación lo llevó a desembolsar dinero sin recibir justificación legal alguna. “Esto es corrupción. Esto es abuso de autoridad. Y es inaceptable tener que pasar por esto”, agregó visiblemente molesto.
Tras el incidente, la situación tomó un giro inesperado. La gobernadora del estado, Mara Lezama, así como personal del torneo, se movilizaron para ayudar a Tirante. “El mensaje se difundió bastante, por suerte, ya hay gente del torneo que se está ocupando, y la gobernadora está muy preocupada por la imagen de Cancún”, comentó el tenista. Lezama envió un mensaje público, enfatizando que tales actos perjudican la reputación de la ciudad turística.
El tenista, a pesar de haber sido víctima de este abuso, señaló que no está interesado en recuperar el dinero que pagó, sino en que la situación se haga pública para que otros no sufran la misma experiencia. “Lo que hice fue porque quiero que se sepa y que les llegue el mensaje de que estuvieron muy mal”, concluyó.
En cuanto a la legalidad del cobro de impuestos en México, la legislación indica que se pueden ingresar bienes personales sin cargos siempre que su valor no exceda la franquicia permitida. Según la página oficial del Gobierno Federal, se permite ingresar hasta $500 en mercancía sin pagar impuestos durante las temporadas vacacionales, y el resto del año la franquicia es de $300. Las cuerdas de raquetas, que son consideradas equipos deportivos, están absolutamente permitidas.
Este caso ha abierto un debate sobre la integridad de las autoridades en los aeropuertos y la necesidad de que se respeten los derechos de los viajeros. La situación de Tirante resuena no solo en el ámbito deportivo, sino también en la percepción de la seguridad y la transparencia en el país, lo que podría tener consecuencias más amplias si no se toman las medidas adecuadas.
La denuncia de Tirante es un recordatorio de que la corrupción puede manifestarse en diferentes formas y lugares, incluso en los puntos de entrada a un país. La comunidad deportiva y los aficionados esperan que este tipo de incidentes no se repitan y que las autoridades tomen cartas en el asunto.