El cambio climático ha llevado a una búsqueda urgente de alternativas para enfriar los hogares, y un nuevo tipo de cemento promete revolucionar esta necesidad. Investigadores, liderados por la científica Fengyin Du de la Universidad del Sureste de Nanjing, en colaboración con la Universidad de Purdue en Indiana, han desarrollado un cemento que puede enfriar edificios sin necesidad de aire acondicionado, según un estudio publicado en Science Advances.
Un cemento innovador
Este cemento se diferencia del tradicional, que generalmente utiliza una mezcla de caliza y arcilla. En cambio, el nuevo material incorpora grañulos molidos de arcilla y yeso, que al ser mezclados con agua y vertidos en moldes de silicona, crean orificios que permiten la circulación del aire. Además, contiene cristales de ettringita, un mineral que refleja la radiación infrarroja. Este mecanismo es similar al de pinturas especiales que reflejan el sol, pero sin necesidad de recubrir la superficie del edificio.
Cuando el sol incide en las paredes construidas con este cemento, los cristales de ettringita desvían la radiación infrarroja, permitiendo que el calor se disipe hacia el exterior. Como resultado, los edificios se mantienen más fríos, lo que podría representar un cambio drástico en la forma en que enfrentamos el calor extremo.
Resultados prometedores
Las pruebas iniciales de este cemento han mostrado resultados positivos. En un experimento realizado en un techo expuesto al sol en la Universidad de Purdue, la temperatura de la superficie del cemento fue 5.4 °C menor que la del aire circundante y 26 °C más baja que la de un techo convencional hecho con cemento Portland. Esto indica que, en lugar de acumular calor, el nuevo cemento efectivamente enfría los espacios.
Los investigadores estiman que este cemento podría ser escalable a nivel industrial, con un costo incluso inferior al de algunos cementos actuales, lo que lo haría accesible para la construcción de viviendas. Se prevé que, en un futuro cercano, este tipo de cemento se convierta en una opción común para la construcción, ayudando a reducir la dependencia del aire acondicionado.
La realidad es que, si este avance se materializa, podríamos estar ante una solución efectiva para combatir el calor, al mismo tiempo que se contribuye a la sostenibilidad y se reduce el gasto energético. La innovación en el campo de los materiales de construcción nunca ha sido tan emocionante.
