La UEFA ha dado luz verde a la solicitud realizada por la Real Federación Española de Fútbol para que el Barcelona y el Villarreal disputen un encuentro en Miami. Este partido se llevará a cabo en el Hard Rock Stadium, un recinto que ya ha sido sede de importantes eventos deportivos, incluyendo la final de la Copa América 2024 y la inauguración del Mundial de Clubes 2025.
El encuentro será parte de la Jornada 17 de LaLiga, marcando un momento histórico, ya que será el primer partido de esta competición celebrado fuera de la península ibérica. A pesar de intentos anteriores fallidos para jugar encuentros en el extranjero, como el que se planificó entre Girona y Barcelona en 2018-19, este evento se confirma como una realidad.
El presidente de LaLiga, Javier Tebas, ha manifestado su interés por expandir el torneo a nuevas localidades, buscando acercar el fútbol español a un público más amplio. Sin embargo, ha existido una fuerte oposición por parte del Real Madrid y su presidente, Florentino Pérez, quienes han expresado su desacuerdo a través de comunicados oficiales, argumentando que los campeonatos nacionales deberían mantenerse en su contexto local.
Por su parte, el presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, ha defendido esta decisión, asegurando que, aunque se permite esta excepción, es fundamental que las competiciones se sigan llevando a cabo en sus entornos tradicionales.
