Los Dodgers de Los Ángeles se coronaron campeones de la Major League Baseball (MLB) al derrotar a los Blue Jays en un intenso séptimo juego, convirtiéndose en el primer equipo en lograr un bicampeonato en el siglo XXI. La victoria se selló con un marcador de 5-4 en el Rogers Centre, sumando así el noveno Trofeo del Comisionado en la historia de la franquicia.
El partido comenzó con un fuerte impacto en la parte baja de la tercera entrada, donde Bo Bichette sorprendió a Shohei Ohtani, el pitcher abridor seleccionado por Dave Roberts, al conectar un cuadrangular que trajo consigo a Vladimir Guerrero Jr. y George Springer, poniendo a los Blue Jays en ventaja con tres carreras.
La tensión aumentó en el cuarto episodio cuando Justin Wrobleski golpeó a Andrés Giménez, lo que desató una pequeña pelea entre los equipos. A pesar de la adversidad, los Dodgers lograron acercarse en el marcador gracias a un batazo de sacrificio de Teoscar Hernández, que permitió a Will Smith anotar.
La defensa de los Blue Jays se destacó en el mismo inning, con una gran atrapada de Daulton Varsho y otra de Vladimir Guerrero Jr., que evitaron más carreras en contra. Los Dodgers volvieron a anotar con otro vuelo de sacrificio, esta vez por parte de Tommy Edman, lo que permitió a Mookie Betts llegar al plato.
La Serie Mundial 2025 se convirtió en histórica, ya que fue la primera en seis años decidida en siete juegos y también marcó un hito al ser la primera vez en 122 años que la temporada comenzó y terminó fuera de Estados Unidos.
Cuando parecía que la presión recaía sobre el equipo local, Giménez logró un doble al jardín central, permitiendo a Ernie Clement sumar la cuarta carrera para los Blue Jays. En la parte alta de la octava entrada, Max Muncy hizo estallar el estadio con un cuadrangular que acercó a los Dodgers, seguido por otro home run de Miguel Rojas en la novena entrada que empató el juego, silenciando el Rogers Centre.
Finalmente, en la parte alta de la onceava entrada, Will Smith hizo posible lo que parecía improbable, al conectar un cuadrangular al jardín izquierdo que le dio la vuelta al marcador. Con la presión a tope, Yamamoto se encargó de cerrar el juego, logrando los tres últimos outs y consagrando a los Dodgers como campeones.































































