El equipo español de gimnasia rítmica ha logrado una destacada actuación al adjudicarse la medalla de bronce en el concurso completo por conjuntos del Mundial que se lleva a cabo en Río de Janeiro, Brasil. Este triunfo no solo reafirma su posición en la élite del deporte, sino que también replica el éxito obtenido en el campeonato anterior realizado en Valencia en 2023.
Un inicio complicado pero brillante final
Las gimnastas Inés Bergua, Andrea Corral, Marina Cortelles, Andrea Fernández, Lucía Muñoz y Salma Solaun comenzaron su competencia con tropiezos en su rutina de cinco cintas, donde un enganche accidental provocó una caída de la cinta y un puntaje de 26.500, colocándolas momentáneamente en la cuarta posición. Sin embargo, la historia dio un giro notable en la prueba mixta de aros y pelotas, donde su desempeño estelar les valió 28.250 puntos, asegurando así el tercer lugar en el concurso completo con un total de 54.750 puntos, superando a la campeona olímpica, China, que obtuvo 53.250 puntos.
La medalla de oro fue para Japón, que se coronó campeón mundial por primera vez con un total de 55.550 puntos, seguido de la anfitriona Brasil con 55.250. Resulta curioso que equipos históricos como Italia y Bulgaria no lograron estar a la altura, ocupando posiciones decimoquinta y sexta, respectivamente, tras caídas y penalizaciones.
Un día marcado por la controversia
La jornada estuvo marcada por un fallo en el sistema de puntuación que afectó notablemente a varios equipos, incluido el español, generando una pausa de media hora en la sesión. A pesar de esto, el equipo dirigido por Alejandra Quereda, subcampeona olímpica en Río 2016, también consiguió su pase a las finales de cinco cintas y del ejercicio mixto que se llevarán a cabo este domingo.
No obstante, las gimnastas Alba Bautista y Lucía González no lograron clasificar para las finales individuales, quedando fuera del corte tras las rutinas de mazas y cinta el día viernes. Bautista finalizó en la vigésima posición con una puntuación total de 82.450, mientras que González concluyó en el vigésimo cuarto puesto con 80.450.
Este bronce reafirma la excelente temporada del equipo español, que ha cosechado tres oros en el Campeonato Europeo y otros tres en la Copa del Mundo, consolidando su lugar como uno de los más destacados en el mundo de la gimnasia rítmica.
