La gestión de Fernando Gago al frente del Necaxa finalmente dio frutos este fin de semana, tras conseguir su primera victoria como director técnico del equipo. Los Rayos se impusieron por un contundente 3-1 ante los Gallos Blancos de Querétaro en el Estadio Victoria, un resultado que no solo respalda el trabajo del estratega argentino, sino que también permite a su equipo sacudirse de la dolorosa derrota sufrida la semana anterior.
El partido comenzó con un ritmo intenso, donde Necaxa mostró su deseo de recuperar la confianza en el torneo. Apenas transcurridos diez minutos, Johan Rojas abrió el marcador. Después de un remate inicial de Díber Cambindo que fue rechazado por la defensa queretana, Rojas aprovechó el rebote y, con una definición precisa, puso el 1-0 en el encuentro. Este primer gol desató la euforia de los aficionados que se dieron cita en el estadio.
La alegría continuó para los locales cuando, a los 21 minutos, el árbitro sancionó un penalti a favor del Necaxa tras una mano en el área de la defensa de Querétaro. Agustín Palavecino, con gran personalidad, tomó la responsabilidad y ejecutó el tiro desde los once pasos, anotando el segundo gol y aumentando la ventaja a 2-0. La afición celebró este tanto con entusiasmo, encendiendo las fuentes del estadio.
Sin embargo, el conjunto queretano no se dio por vencido. A pesar de estar en desventaja, lograron descontar el marcador gracias a Jonathan Perlaza. El ecuatoriano aprovechó una recuperación de su equipo, se encontró en un mano a mano con el portero Unsain y definió con un disparo al poste izquierdo, poniendo el 2-1 y avivando la esperanza entre los seguidores de los Gallos.
El partido se mantuvo reñido hasta los minutos finales, cuando Pável Pérez se encargó de devolver la tranquilidad al Necaxa. Con un excelente desborde de Monreal, Pérez anotó el tercer gol del encuentro, sellando así la victoria para los Rayos. Este tanto no solo significó el triunfo, sino que también consolidó la confianza entre Gago y sus jugadores, quienes celebraron junto a su afición en un Estadio Victoria que comenzó a vibrar de nuevo.
Gago, quien había manifestado su deseo de construir un equipo competitivo, pudo ver en esta ocasión un partido redondo que le permite encarar con optimismo los próximos desafíos en la Liga MX. La victoria no solo es significativa en términos de puntos, sino que también representa un paso importante en el proceso de reconocimiento y adaptación del director técnico argentino al fútbol mexicano.
La afición del Necaxa puede por fin respirar con alivio, mientras que los queretanos deberán replantear su estrategia para los próximos encuentros, buscando recuperar el terreno perdido en la tabla. Esta jornada dejó claro que la competencia es intensa y cada punto cuenta en la búsqueda de los objetivos de la temporada.
