El Galatasaray logró una victoria crucial al vencer 1-0 al Liverpool en Estambul, gracias a un penalti ejecutado por Victor Osimhen en el minuto 28. Este resultado refleja el momento complicado que atraviesa el equipo inglés en la fase de grupos de la Liga de Campeones.
El Liverpool se aproximó al empate en el minuto 89, cuando el árbitro sancionó un penalti a su favor. Sin embargo, tras revisar la jugada en el VAR, la decisión fue revertida, dejando a los visitantes sin la oportunidad de igualar el marcador. La reacción del Liverpool incluyó un cabezazo de Konaté y un intento de Wirtz, pero ambos esfuerzos fueron contenidos por el portero Cakir.
El equipo turco tuvo la oportunidad de ampliar su ventaja en el minuto 55, cuando Osimhen volvió a amenazar la portería del Liverpool, pero el arquero Alisson detuvo su disparo antes de sufrir una lesión. A pesar de la presión ejercida por el Liverpool en los minutos finales, su falta de claridad ofensiva fue evidente.
En la última jugada, el árbitro pitó un penalti sobre Konaté por una falta de Singo, pero nuevamente el VAR anuló la decisión, asegurando así que el Galatasaray se llevara sus primeros tres puntos tras haber perdido en su debut ante el Eintracht Frankfurt.
En otro partido de la jornada, el Chelsea se impuso 1-0 al Benfica en Stamford Bridge. La victoria se produjo gracias a un autogol del colombiano Richard Ríos al minuto 18, en un regreso amargo para el entrenador José Mourinho a su antigua casa.
La jugada clave en este encuentro surgió a raíz de un cambio de orientación hacia Alejandro Garnacho, cuyo centro fue desviado por Ríos hacia su propia portería. Aunque el Benfica intentó recuperar el terreno perdido, se encontró con la sólida actuación del portero del Chelsea, Robert Sánchez, quien detuvo un mano a mano a Fredrik Aursnes y desvió otro disparo de Lukebakio con la ayuda del poste.
A pesar de que el Benfica mostró esfuerzo, su falta de precisión en el último tercio resultó frustrante para su afición, que abucheó a Enzo Fernández, exjugador del Benfica. Mourinho, en un intento por calmar los ánimos, pidió paciencia para reanudar el juego. Chelsea, que finalizó con diez jugadores tras la expulsión de Joao Pedro por doble amarilla, logró mantener su ventaja mínima.
Este resultado marca la primera victoria del Chelsea en la fase de grupos, mientras que el Benfica acumula su segunda derrota tras caer ante el Qarabag en su debut.
