El joven futbolista Gilberto Mora, recién llegado del Mundial Sub 20, tuvo un impacto inmediato en su primer partido con Xolos de Tijuana contra Puebla. Mora, de tan solo 17 años, fue fundamental al provocar un penal que permitió a su equipo tomar la delantera en el marcador.
Durante una jugada dentro del área, Mora se encontraba listo para recibir el balón y ejecutar un remate, pero fue sujetado por el debutante Álvaro de la Rosa, lo que lo llevó a caer al suelo. El árbitro, Gato Ortiz, no dudó en señalar la falta y otorgar el penal.
Aunque todo parecía indicar que el propio Mora se encargaría de la ejecución, fue Kevin Castañeda quien tomó la responsabilidad. Castañeda cobró con éxito desde los once pasos, poniendo a Xolos en ventaja 1-0. Poco después, el mismo Castañeda amplió la ventaja, anotando su segundo gol y dejando al Puebla sin respuesta en su propio estadio, que lucía semivacío debido al descontento de los aficionados por el desempeño del equipo.
Sin embargo, el partido tomó un giro en el minuto 67 cuando Ricardo Marín acortó distancias para Puebla, lo que desató una reacción entre los jugadores y la afición. Tras el gol de Álvaro de la Rosa, quien anteriormente había cometido el penal, Puebla logró empatar. Pero la alegría fue breve, ya que Mourad Daoudi recuperó la ventaja para Xolos, culminando así un emocionante encuentro que dejó a Puebla enfrentando una crisis tras otra derrota.
La actuación de Mora, especialmente después de su experiencia en el Mundial, resalta su potencial como una de las promesas del fútbol mexicano.
