El mundo del béisbol en Yucatán se vistió de nostalgia tras la muerte de Carlos Paz González, un referente en la dirección de los Leones de Yucatán. Su legado, sin embargo, sigue vivo en las memorias de quienes compartieron con él momentos inolvidables. Uno de esos recuerdos proviene de Ken Angulo, un destacado pitcher que fue fundamental en la temporada de 1984, cuando el equipo logró la anhelada coronación.
Angulo, oriundo de West Covina, llegó a los Leones en un año que marcaría su carrera y la historia del béisbol yucateco. La reciente noticia del fallecimiento de Paz González le causó gran tristeza, como lo compartió en un emotivo mensaje a Juan Carlos León, infielder que también formó parte de ese equipo campeón. “No sabía lo de Carlos, me dio mucha tristeza cuando me enteré de la noticia. Carlos era un buen tipo y buen mánager. Yo jugué para él tres años”, expresó Angulo, recordando no solo la figura del entrenador, sino también la camaradería que se forjó en el equipo.
La conexión de Angulo con Yucatán es profunda. A pesar de haber pasado más de tres décadas desde su participación, el pitcher no olvida la calidez de la afición yucateca. “Nadie me dijo nada sobre eso, ya sabes, nadie nunca me pide regresar a Yucatán. Yo gané muchos juegos para ellos, o sea, para los dueños. Y yo sé que los dueños ya no están, pero realmente aprecio mucho a la gente en Yucatán”, comentó con nostalgia. Su deseo de volver y revivir esos momentos resuena en su mensaje, donde destaca su deseo de regresar a la ciudad que tanto le brindó.
En 1984, Angulo tuvo una destacada temporada, finalizando con un récord de 14-4, seis lechadas y 162 ponches en 136 entradas. Junto a otros talentos como Freddie Arroyo, Ernesto Escárraga y Lupe Salinas, formaron una rotación que llevó a los Leones a una remontada histórica. Desde clasificar a los playoffs hasta barrer a los Diablos en la primera ronda, su camino culminó con la victoria ante los Indios de Ciudad Juárez, un hito que permanece grabado en la memoria colectiva de los aficionados.
La historia de Angulo no solo habla de números y victorias, sino de un legado que trasciende el deporte. “Haber jugado para Carlos fue realmente bueno. Ganamos el campeonato y eso es todo lo que pude hacer para la ciudad de Mérida”, reflexiona, recordando la importancia de ese título en su vida y en la de muchos yucatecos.
La admiración por su desempeño en el montículo se mantiene viva, y León, quien también fue testigo de esa época dorada, afirma: “Fue un gran pitcher, un puntal de la coronación de Yucatán”. Frases como estas resaltan la relevancia de Angulo en la historia del béisbol local, y su nombre se suma a la lista de grandes figuras que han dejado huella en el deporte.
La comunidad beisbolera de Yucatán aún recuerda con cariño a Angulo y su contribución al equipo. Desde sus hazañas en el terreno de juego hasta su deseo de volver a la tierra que lo acogió, el legado de este héroe del béisbol perdura. La conexión entre los jugadores y la afición se mantiene firme, y cada recuerdo que comparten es un testimonio del impacto que el béisbol ha tenido en la cultura yucateca.
Así, en medio del luto por la pérdida de un gran líder como Paz González, los ecos de 1984 resuenan con fuerza. Ken Angulo, con su espíritu nostálgico y su amor por Yucatán, recuerda no solo un campeonato, sino un capítulo de su vida que, como él mismo dice, nunca podrá olvidar.
