La selección de Brasil continúa enfrentando una racha de fracasos en el fútbol que parece no tener fin. Desde la eliminación del equipo mayor en el Mundial de Qatar 2022, la historia se repite en las categorías inferiores, destacando la reciente eliminación del equipo sub-20 en el Mundial de la FIFA.
Esta serie de resultados negativos ha llevado a algunos a hablar de la “maldición del gato”. Este fenómeno se originó en el Mundial de Qatar, cuando Vinicius Rodrigues, exjefe de prensa de la selección brasileña, lanzó a un gato durante una conferencia de prensa. La acción, que fue vista como violenta, provocó risas entre los presentes, incluido el jugador Vinicius Jr.
Desde aquel momento, Brasil ha vivido una caída estrepitosa en el rendimiento. En el Mundial de Qatar, la selección fue eliminada por Croacia, un hecho que marcó el inicio de una serie de derrotas. En el ámbito de las eliminatorias, el equipo perdió por primera vez ante Colombia y sufrió su primera derrota en 22 años contra Uruguay. Además, Brasil se ubicó en el quinto lugar de las eliminatorias sudamericanas, la peor posición en su historia.
La selección sub-20 no ha sido la excepción a esta mala racha. Recientemente, sufrió su peor derrota en un Sudamericano Sub-20 al caer 0-6 ante Argentina. Posteriormente, en el Mundial Sub-20, Brasil quedó eliminado en la fase de grupos, sumando solo un punto tras empatar con la selección mexicana. Este desempeño establece un nuevo récord negativo para la Canarinha.
El impacto de la “maldición del gato” parece haber dejado una huella difícil de borrar en el fútbol brasileño. Con el cambio de entrenadores y una serie de resultados decepcionantes, la afición se pregunta si la historia podrá cambiar en el futuro. Cada encuentro y cada torneo se convierten en una prueba más de la crisis que enfrenta el fútbol en el país del pentacampeón mundial.