En un duelo crucial, los Pittsburgh Steelers se impusieron a los Cleveland Browns con un marcador de 23-9, consolidando así su liderazgo en la División Norte de la Conferencia Americana de la NFL. El enfrentamiento tuvo lugar en el Acrisure Stadium, donde los Steelers aprovecharon la falta de descanso de sus rivales.
Los Browns, que venían de una derrota en Londres ante los Vikings, no pudieron aprovechar su nuevo quarterback, Dillon Gabriel, quien tomó el lugar de Joe Flacco. El viaje de regreso a Pensilvania tras el largo desplazamiento, y la falta de descanso, se hizo evidente en el rendimiento del equipo.
La defensa de Cleveland mostró fortaleza al limitar a Pittsburgh a solo tres goles de campo en los primeros dos cuartos, todos anotados por Chris Boswell. Sin embargo, la ofensiva de los Browns fue ineficaz, logrando apenas tres puntos gracias a un intento de gol de campo de Andre Szmyt.
Fue en el tercer cuarto cuando el quarterback Aaron Rodgers conectó con el ala cerrada Connor Heyward para el primer touchdown, marcando el rumbo del partido. Posteriormente, Rodgers lanzó un pase de 25 yardas a DK Metcalf, lo que prácticamente selló la victoria para los Steelers.
A pesar de tener oportunidades para acercarse en el marcador, la presión defensiva ejercida por Jalen Ramsey y Derrick Harmon resultó determinante, limitando el avance de los Browns y forzando más intentos de goles de campo.
Con esta victoria, los Steelers se afianzan como líderes en solitario de la AFC Norte con un récord de 3-1. Por su parte, los Browns caen a 1-4, mientras que los Ravens, que no contaron nuevamente con Lamar Jackson, sufrieron su cuarta derrota consecutiva, quedando en el fondo de la división con un registro de 1-5.
Este resultado marca un momento clave en la temporada, donde los Steelers han demostrado ser un equipo formidable, mientras que los Browns y Ravens enfrentan desafíos significativos para revertir su situación.
