A pesar de los aranceles implementados, el 70% del comercio global continúa operando bajo normativas internacionales, según lo afirmó Rebeca Grynspan durante la Conferencia de Comercio y Desarrollo de la UNCTAD, celebrada en Ginebra, Suiza.
Grynspan señaló que, incluso en un año complicado marcado por la imposición de aranceles y dificultades económicas, aproximadamente tres cuartas partes del comercio internacional todavía se mueve conforme a reglas establecidas. “Este año ha sido difícil para el comercio, y aún más para los ministros de Comercio, Relaciones Exteriores y Finanzas”, expresó la secretaria general de la UNCTAD.
La funcionaria destacó que, a pesar de los retos, existen señales de estabilidad en el comercio. “El 72% del comercio sigue las normativas de la Organización Mundial del Comercio”, indicó. Según datos de la UNCTAD, el comercio está creciendo entre 5% y 6% en precios corrientes anualmente, y 9% si se excluyen los datos de China en el análisis de los países del sur.
Durante su intervención, Grynspan añadió que los constantes esfuerzos de los ministros de comercio han permitido evitar un efecto dominó de los aranceles que, en el pasado, llevó a la economía mundial a una profunda crisis en los años 30. “Ellos continuaron negociando cuando parecía inútil, defendiendo un sistema basado en reglas mientras trabajaban para reformarlo y construyendo puentes incluso en tiempos adversos”, comentó.
Grynspan también advirtió que el comercio se encuentra en una fase de transición, con presiones sobre el sistema multilateral que afectan todos los aspectos del comercio mundial. “Ser multilateralista significa ser un reformista”, afirmó. “Estamos en un periodo de transición, donde lo viejo no ha muerto y lo nuevo aún no ha nacido. Este es un tiempo de contracciones, donde fuerzas dispares coexisten y lo que hagamos definirá el futuro”, agregó.
Ante los cambios inminentes, Grynspan invitó a observar las oportunidades de inclusión en la “reconfiguración” de la economía global, resaltando el potencial de nuevos patrones comerciales, servicios resilientes, tecnologías limpias e inteligencia artificial. Concluyó su discurso enfatizando que la cuestión crucial no es si habrá cambios, sino quién los liderará y en beneficio de quién. “Hemos venido aquí para forjar un futuro conjunto, donde el comercio, la inversión y la tecnología beneficien a las personas”, subrayó.
En un contexto relacionado, se ha informado que Estados Unidos está considerando imponer aranceles de hasta 100% a Nicaragua y suspender beneficios comerciales debido a abusos laborales y violaciones a los derechos humanos.