El gasto en salud de las familias mexicanas ha incrementado un 7.9% en los últimos años, lo que refleja una preocupación creciente por la atención médica y los servicios de salud en el país. Según estimaciones de México Evaluá, cada hogar en México desembolsó un promedio de 1,605 pesos trimestrales en 2024 para cubrir necesidades de salud, que incluyen desde chequeos y estudios hasta cirugías y atención a enfermedades.
Un gasto que crece
Este aumento en los gastos de salud está directamente relacionado con la caída en la cobertura pública de servicios médicos en el país, lo que ha obligado a las familias a destinar una mayor parte de sus ingresos a este rubro. La Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos en los Hogares (ENIGH), realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), revela que el gasto promedio en atención médica y medicamentos se ha elevado considerablemente comparado con el año 2022.
El impacto de estos gastos es desproporcionado, afectando más a los hogares de menores recursos. Por ejemplo, las familias del decil I destinan un 3.9% de su ingreso corriente a cuestiones de salud, mientras que aquellos en los niveles más altos, como los hogares más ricos, solo asignan 2.1%%. Esta disparidad subraya la desigualdad en el acceso a servicios de salud en México.
Consecuencias para las familias mexicanas
La realidad es que este incremento en el gasto familiar en salud no solo impacta las finanzas domésticas, sino que también refleja una crisis en el sistema de salud pública. Cada vez más, las familias se ven forzadas a buscar atención médica privada, lo que representa un reto adicional para los hogares con ingresos limitados. Sin duda, la situación exige una reflexión profunda sobre cómo mejorar y asegurar el acceso a servicios de salud de calidad para toda la población.
El aumento del 7.9% en los gastos de salud es un claro indicativo de la necesidad urgente de reformas en el sistema de salud, que permitan no solo mejorar la cobertura, sino también garantizar que cada familia en México pueda acceder a la atención médica que necesita sin que eso signifique un sacrificio financiero.