En Nuevo León, aproximadamente 900 mil trabajadores se benefician de los vales de despensa, una prestación laboral que se ha convertido en la segunda más apreciada en México, solo superada por el fondo de ahorro. Este beneficio representa, en promedio, una aportación de alrededor de 1,500 pesos mensuales por empleado.
En una entrevista con el Financiero, Marco Martinez, presidente ejecutivo de la Asociación de Sociedades Emisoras de Vales de Despensa (ASEVAL), indicó que entre el 55 y el 70 por ciento de las empresas formales en Nuevo León ofrecen esta prestación. “Nuevo León es uno de los estados que más vales de despensa proporciona”, destacó Martínez.
A nivel nacional, más de 10 millones de trabajadores reciben vales de despensa mensualmente, y Nuevo León concentra un 10 por ciento de esta cifra. Este esquema representa una inyección de casi 1,500 millones de pesos anuales en la economía del estado, recursos que se dirigen principalmente al comercio formal.
Las empresas en Nuevo León fueron pioneras en ofrecer este tipo de beneficios. De hecho, históricamente, Fundidora y Cervecería comenzaron a otorgar canastas físicas a sus empleados. Este año, los vales de despensa celebran 40 años de haberse establecido como una prestación formal en el país.