La Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca) ha capacitado a un total de 1,425 acuacultores en 13 entidades federativas de México, como parte de su compromiso por impulsar los cultivos de tilapia y ostión. Esta iniciativa se enmarca dentro del Programa Nacional de Acompañamiento Técnico Acuícola Autogestivo (PNATAA), que busca fortalecer la producción en pequeña escala y promover la resiliencia de las unidades productivas.
Capacitación con enfoque autogestivo
Las capacitaciones se llevaron a cabo en 128 unidades de producción en estados como Nayarit, Michoacán, Colima, Ciudad de México, Estado de México, Tamaulipas, Veracruz, Tlaxcala, Puebla, Morelos, Hidalgo, Oaxaca y Tabasco. El director general de Infraestructura de Conapesca, Javier Martínez Cordero, destacó que el enfoque del programa es autogestivo, orientado a “capacitar a capacitadores” para generar habilidades en el territorio local.
“Lo importante y diferente es el enfoque autogestivo: buscamos generar capacidades en el propio territorio; es decir, capacitar a capacitadores”, enfatizó Martínez Cordero. Las capacitaciones están centradas en las especies clave de la política acuícola nacional, donde la tilapia en agua dulce y el ostión en agua marina concentran la mayor cantidad de producción. En 2024, estas especies registraron 67,983 y 30,616 toneladas, respectivamente.
Colaboración y beneficios para el sector
Este esfuerzo se realiza en coordinación con gobiernos estatales y agentes locales, así como con las Escuelas de Campo de AGRICULTURA, generando un ambiente de alta satisfacción en el sector por la presencia activa de Conapesca en el territorio. Además de los contenidos técnicos, el PNATAA incorpora aspectos esenciales como la inscripción al Registro Nacional de Pesca y Acuacultura, difusión del Programa de Subsidio Eléctrico para la Acuacultura, y módulos sobre cambio climático, igualdad de género, genética, sanidad y análisis de información.
Por último, Conapesca invita a los interesados en recibir capacitación del PNATAA a acercarse a la oficina de representación estatal o local más cercana para gestionar su incorporación. Este programa no solo fortalece las capacidades de los acuacultores, sino que también asegura un futuro más sostenible para la acuacultura en México.