El lunes pasado, el Ayuntamiento de Córdoba aprobó la iniciativa de La Perla Food, declarando su proyecto como un Proyecto de Interés Empresarial. Esta decisión permitirá la construcción de una fábrica de comida precocinada en el parque tecnológico de Rabanales 21.
La nueva instalación está diseñada para satisfacer el crecimiento de La Perla Food, que cuenta con más de 30 años de trayectoria en el sector de alimentos precocinados de alta calidad. El proyecto contempla un enfoque en la sostenibilidad, la economía circular, la eficiencia energética y la innovación tecnológica.
La inversión total para este ambicioso plan se estima en 8,83 millones de euros, que se distribuirán en dos fases entre 2025 y 2031. Durante la primera etapa, se implementarán líneas automatizadas para procesos de prefritura, congelación y envasado, además de un fuerte énfasis en la investigación, desarrollo e innovación (I+D+i) para crear nuevos formatos de productos saludables.
Según la memoria del proyecto, se anticipan más de 60 empleos directos en la fase inicial, que corresponde al periodo de 2025 a 2028. Con el tiempo, se espera que el número de puestos de trabajo supere los 100 para 2031, alcanzando una cifra estimada de 108 empleos.
Desde una perspectiva económica, el plan asegura su viabilidad, proyectando un incremento en la facturación, que pasaría de 8,6 millones de euros en 2024 a más de 38 millones en 2031. Entre los objetivos estratégicos de La Perla Food se encuentra consolidarse como un referente en el ámbito agroalimentario del sur de Europa y aumentar su capacidad de producción para hacer frente a la creciente demanda tanto a nivel nacional como internacional.
El proyecto también se alinea con las estrategias municipales de sostenibilidad, comprometiéndose a promover el uso de energías limpias, reducir residuos y utilizar envases 100% reciclables. Además, se fomentará la colaboración entre el sector público y privado, incluyendo universidades y centros tecnológicos.
La declaración como Proyecto de Especial Interés para la ciudad se justifica en que la iniciativa cumple con varios requisitos, como su impacto significativo en el empleo local, la atracción de una inversión relevante, su alto grado de innovación y valor añadido, así como su compatibilidad urbanística con la ubicación en el Parque Tecnológico de Rabanales.
