El mercado de las apuestas en eventos futuros está experimentando un crecimiento sin precedentes, en gran parte gracias a la influencia de Donald Trump Jr.. Desde que se unió como asesor a las plataformas Kalshi y Polymarket, la actividad en este sector ha aumentado significativamente.
La historia de Kalshi comienza en 2018, cuando dos estudiantes del MIT, Tarek Mansour y Luana Lopes Lara, idearon una forma de revolucionar Wall Street utilizando tecnología para apostar sobre eventos inciertos, como resultados electorales y fenómenos climatológicos. Siete años después, Kalshi se ha consolidado como un líder en este nuevo mercado, moviendo miles de millones de euros.
Junto a su competidor Polymarket, estas plataformas han atraído la atención de inversionistas de renombre en Silicon Valley y Wall Street, aumentando su valoración a cifras multimillonarias. La participación de Trump Jr. en este auge no es casualidad; su conexión con el mundo político y financiero ha permitido que estas plataformas se desarrollen en un entorno regulatorio favorable.
Antes de la llegada de Kalshi, apostar sobre el resultado de elecciones era ilegal en Estados Unidos. Sin embargo, la determinación de Mansour, respaldada por su experiencia en Goldman Sachs y Citadel Securities, llevó a Kalshi a convertirse en la primera plataforma autorizada por la Comisión de Comercio de Futuros de Productos Básicos (CFTC) para negociar contratos de eventos.
El sistema de apuestas de Kalshi y Polymarket permite a los usuarios comprar acciones de “sí” o “no” sobre eventos futuros, con precios que fluctúan según la demanda. Este enfoque ha creado una adicción entre los apostadores, convirtiendo a estas plataformas en herramientas no solo financieras, sino también políticas.
Los defensores de estos mercados argumentan que, al haber dinero en juego, las predicciones son más precisas que las encuestas tradicionales. En 2024, por ejemplo, los mercados de predicción anticiparon la victoria de Trump con mayor precisión que muchas encuestas.
La influencia de la familia Trump en estas plataformas no se limita a Trump Jr.; varios exfuncionarios de su administración han asumido roles clave en el desarrollo y regulación de Kalshi y Polymarket. Esto ha generado preocupaciones sobre posibles conflictos de interés, especialmente con la reciente nominación de Brian Quintenz para dirigir la agencia reguladora que supervisa estas operaciones.
Ambas plataformas enfrentan actualmente desafíos legales en varios estados, que argumentan que sus contratos constituyen apuestas ilegales. Sin embargo, Kalshi ha contraatacado, afirmando que su autorización federal prevalece sobre las leyes estatales. En este entorno incierto, millones de estadounidenses participan en un mercado que combina apuestas, especulación y política, mientras la Casa Blanca parece moverse en las sombras para beneficiarse de esta nueva economía digital.
