El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha ajustado su pronóstico de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de México para este año, aumentando la cifra de 0.2% a 1%. Este ajuste se acompaña de un llamado a realizar un esfuerzo considerable para alcanzar la consolidación fiscal prometida tras el endeudamiento que se generó para financiar la finalización de proyectos de infraestructura durante el último año del anterior gobierno.
En su evaluación anual, el FMI subrayó que será crucial una implementación clara y prudente del plan de rescate de Petróleos Mexicanos (Pemex), ya que las operaciones financieras de la empresa crean pasivos contingentes que afectan al Estado. Aunque se espera que la expansión fiscal de 2024 se revierta en 2025, el organismo internacional considera que se deben implementar medidas concretas equivalentes a aproximadamente 1.5% del PIB para lograr una consolidación efectiva.
El FMI ha indicado que se requiere una reducción significativa del déficit y políticas que apoyen este ajuste para prevenir nuevos incrementos en la deuda pública y permitir un margen fiscal que responda a posibles crisis económicas. En este contexto, el organismo anticipa una ligera aceleración en el crecimiento económico de México para 2026, aunque advirtió que los efectos de los aranceles y la incertidumbre en el comercio internacional seguirán presentes.
A largo plazo, el éxito económico de México dependerá de cerrar las brechas en infraestructura, fortalecer el Estado de derecho y profundizar la integración con los socios comerciales a nivel global. Sin embargo, el FMI también hizo hincapié en que persisten presiones inflacionarias, y a pesar de que los precios de servicios subyacentes han disminuido gradualmente, este descenso ha sido compensado por un aumento en la inflación de bienes en los últimos meses.
Asimismo, las expectativas de inflación a corto plazo se mantienen por encima de la meta establecida por Banxico, aunque estas se muestran estables. El FMI también instó a que los esfuerzos para fomentar la inclusión financiera y expandir el crédito se enfoquen en promover la competencia entre intermediarios. En cuanto a los planes para fortalecer el crédito hipotecario y de pequeñas y medianas empresas (Pymes) a través de un aumento en préstamos y garantías de la banca de desarrollo y Infonavit, el FMI solicitó que estas iniciativas sean transparentes, que se consideren las implicaciones fiscales y que se garantice la participación del sector privado.
