El ejército israelí anunció el pasado domingo que llevó a cabo un bombardeo contra una “infraestructura energética” en la región de Sanaá, capital de Yemen, la cual es utilizada por los rebeldes hutíes. Según el comunicado oficial, esta operación se realizó a una distancia aproximada de 2,000 kilómetros de Israel, en el corazón de Yemen, como parte de su estrategia contra lo que consideran un régimen terrorista.
Las fuerzas israelíes señalaron que el ataque se dirigió específicamente a instalaciones que, de acuerdo con su evaluación, estaban siendo empleadas por los hutíes para sus operaciones. Por su parte, la televisión Al Masirah, vinculada a los hutíes, reportó que hubo “una agresión contra la planta energética de Haziz“, ubicada al sur de Sanaá. Hasta el momento, no se han reportado bajas como resultado de este ataque.
Contexto del conflicto en Yemen
Desde el inicio de la guerra entre Israel y el movimiento islamista Hamás en la Franja de Gaza, los hutíes han intensificado sus ataques lanzando misiles y drones hacia Israel, argumentando que lo hacen en solidaridad con los palestinos. Aunque la mayoría de estos ataques han sido interceptados, han provocado represalias en forma de bombardeos israelíes.
En el contexto de la escalada de hostilidades, los hutíes también han dirigido ataques contra embarcaciones que consideran cercanas a Israel en el mar Rojo y el golfo de Adén. Este grupo rebelde, que cuenta con el apoyo de Irán, ha ampliado su campaña para atacar barcos de Estados Unidos y Reino Unido, tras el inicio de bombardeos por parte de estos países en enero de 2024, con el objetivo de asegurar las rutas de navegación en la región.
Alto al fuego y futuras acciones
En mayo de 2024, los insurgentes lograron un alto el fuego con Washington que puso fin a semanas de bombardeos estadounidenses, aunque han prometido continuar atacando barcos israelíes. Este escenario refleja la complejidad del conflicto en Yemen, donde las dinámicas regionales y las alianzas influyen en la actual situación de seguridad.
A medida que la situación evoluciona, será crucial seguir de cerca las reacciones tanto de los grupos rebeldes como de los gobiernos involucrados, ya que el conflicto en Yemen tiene implicaciones significativas para la estabilidad en todo el Medio Oriente.