Las propiedades de lujo en España han experimentado un notable crecimiento, duplicando sus ventas en los últimos cinco años. Este fenómeno, conocido como el lujo ‘silencioso’, se caracteriza por la discreción en la compra y venta de inmuebles, donde tanto vendedores como compradores prefieren mantener un perfil bajo y evitar la atención mediática.
El auge del mercado inmobiliario de lujo
Según un informe de Fotocasa e Infinitum, entre enero de 2019 y marzo de 2024, la disponibilidad de inmuebles residenciales con un precio superior a 800,000 euros se incrementó más de un 150%. En el mismo periodo, el número de interesados en este tipo de propiedades creció un 97%, lo que significa que prácticamente se duplicó el número de demandantes.
La inmobiliaria Lucas Fox, que trabaja con grandes inversores, reporta que la oferta de propiedades exclusivas con un precio de 2.5 millones de euros o más aumentó un 7% en comparación con el año anterior. Esto ocurre a pesar de que la oferta de inmuebles en su cartera se redujo un 12%, lo que indica un mercado más ajustado.
En ciudades como Madrid y Barcelona, los compradores están pagando entre 2 y 4 millones de euros por propiedades, y algunas casas exclusivas pueden superar los 10 millones de euros, según datos de la inmobiliaria Walter Haus. En Baleares y la Costa del Sol, el importe medio de las operaciones es de alrededor de 4 millones de euros, aunque se han registrado transacciones que superan los 20 millones de euros.
Factores detrás del crecimiento del sector ‘prime’
Es curioso cómo, en un contexto de crisis inmobiliaria, el sector denominado ‘prime’ está viviendo una etapa dorada. Según Antoni Cunyat, profesor de Análisis Económico en la Universitat de València, el consumo de bienes de lujo ha aumentado a nivel global desde la pandemia. Los compradores, en su mayoría millonarios o multimillonarios, no se ven afectados por las fluctuaciones de precios y buscan diversificar sus activos en tiempos de incertidumbre económica.
La Comunidad de Madrid lidera la demanda con un 36.1% del total de interesados en viviendas de lujo, seguida de Barcelona con 14.6%, Málaga con 11.6%, y Baleares con 9%. La búsqueda de propiedades se centra en acabados de calidad, eficiencia energética y ubicaciones tranquilas, sin renunciar a la comodidad.
Las casas de lujo que se están vendiendo actualmente en España priorizan criterios como el confort y la tranquilidad. Desde Gesmar 2000, una inmobiliaria en Alicante, indican que los clientes valoran elementos como ventanas de triple acristalamiento que garantizan silencio absoluto, así como calefacción por suelo radiante, que brinda calidez en invierno sin ser visible. No es necesario que estas propiedades estén en primera línea de playa; lo que buscan es calidad de vida en entornos discretos.
En resumen, el sector de lujo en España está en plena expansión, con compradores que priorizan la privacidad y el confort, lo que refleja una tendencia que parece estar diseñada para permanecer en el tiempo.