El Gobierno de México ha decidido restringir el ingreso de ganado proveniente de Centroamérica, permitiendo su entrada únicamente a través de Puerto Chiapas. Esta medida fue anunciada por la presidenta Claudia Sheinbaum, quien explicó que se han incrementado los filtros en las carreteras para dar un mejor control a la importación de este ganado, que a veces resulta difícil de regular.
Controles más estrictos en carreteras y puertos
Sheinbaum detalló que, en un esfuerzo por asegurar la sanidad del ganado nacional, se han suspendido las autorizaciones para que el ganado llegue a Mazatlán y ahora sólo podrá ingresar por el sur. “Se está viendo la posibilidad de que lleguen a Puerto Chiapas, donde habrá un control más riguroso”, afirmó la mandataria.
La presidenta destacó que esta medida es crucial para prevenir cualquier riesgo de infección al ganado del norte del país, que hasta el momento no ha enfrentado problemas de salud. “La importación se ha limitado al puerto del sur, donde se podrán realizar las revisiones necesarias”, agregó.
Plan de producción de carne nacional
En su intervención, Claudia Sheinbaum también anunció un plan para fomentar la producción de carne en México en lugar de depender de la importación. Este proyecto forma parte del Plan México y se implementará en varios estados, incluyendo Sonora, Coahuila, Durango, Chihuahua y Tamaulipas.
“Ya tenemos recursos definidos y un esquema de producción que se presentará a los gobernadores y ganaderos de esos estados”, señaló Sheinbaum. Esta estrategia busca asegurar que el ganado que se produzca en México cumpla con todos los mecanismos de sanidad necesarios, promoviendo así una industria más autosuficiente y segura.
Con estas medidas, el Gobierno de México busca fortalecer la sanidad animal y la producción local, garantizando un mejor manejo del ganado y protegiendo la economía de los productores nacionales. La decisión de concentrar la importación en Puerto Chiapas representa un paso significativo en el control de la sanidad ganadera en el país.