Las dos presentaciones de Oasis en la Ciudad de México, realizadas el fin de semana pasado, dejaron un impacto económico notable, generando una derrama de casi mil millones de pesos (54.5 millones de dólares) según cifras de los promotores. Este regreso, tras una separación de 16 años, fue parte de su gira Live ’25, y atrajo a una multitud de fanáticos que no quisieron perderse el icónico retorno de los hermanos Liam y Noel Gallagher a los escenarios.
Un fin de semana de gran movimiento económico
De acuerdo con la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de la Ciudad de México (Canaco), la asistencia de más de 130 mil personas contribuyó a una derrama estimada entre 850 y mil millones de pesos en solo dos días. Este evento no solo reunió a fanáticos locales, sino que también atrajo a visitantes de distintos estados de la República, incluyendo Nuevo León, Sonora, Jalisco, Baja California y Guanajuato, así como de países tan lejanos como Reino Unido, Estados Unidos y varias naciones de Centro y Sudamérica.
El Estadio GNP Seguros fue el escenario elegido para este gran regreso, y se proyectó una ocupación hotelera cercana al 80% en las zonas aledañas. Es impresionante saber que, según datos de Ticketmaster México, el 50% de los asistentes provenía de fuera de la Ciudad de México y el Estado de México, mientras que un 10% correspondió a público extranjero, representando a 79 países y más de 220 ciudades del mundo.
CDMX, un punto estratégico en el circuito musical
Las presentaciones en la capital mexicana marcaron la primera parada de la gira de Oasis en un país de habla hispana, consolidando el estatus de la Ciudad de México como un punto clave en el circuito internacional de giras de conciertos. La realidad es que el regreso de Oasis ha revitalizado no solo el interés por su música, sino que también ha demostrado el poder económico que la industria del entretenimiento tiene en la capital. Este evento es un claro ejemplo de cómo la música puede unir a personas de diferentes partes del mundo, generando un impacto significativo en la economía local y en la cultura compartida.
Vale la pena mencionar que la energía y el entusiasmo de los fanáticos durante los conciertos reflejan el legado perdurable de Oasis y su influencia en la música contemporánea. Sin duda, su regreso ha dejado una huella profunda en la memoria colectiva de sus seguidores en México.
































































