El Gobierno de Sonora ha dado un paso histórico en la transición energética con la construcción de la Central Fotovoltaica “Rafael Galván” en Puerto Peñasco, reconocida como la planta solar más grande de Latinoamérica. Este impresionante proyecto, que forma parte del Plan Sonora de Energías Sostenibles, representa una inversión superior a los 1,200 millones de dólares.
En su primera etapa, la planta generará 300 megawatts de energía limpia y contará con 60 megawatts en baterías de almacenamiento, suficientes para abastecer de electricidad a más de 160,800 hogares. Una vez que alcance su capacidad máxima de 1 gigawatt, se estima que este proyecto podrá reducir la emisión de 1.4 millones de toneladas de dióxido de carbono, contribuyendo significativamente a la lucha contra el cambio climático.
Impacto social y económico
La Central Fotovoltaica “Rafael Galván” no solo es una obra de infraestructura energética, sino también un motor de desarrollo económico y social. Su construcción ha generado empleos locales y fortalecerá la competitividad del estado al ofrecer energía más limpia, confiable y sustentable tanto para la industria como para la vida cotidiana. En un contexto donde el costo de la electricidad es primordial para las familias, el Gobierno de Sonora ha ampliado el subsidio eléctrico, beneficiando a todas las familias de los 72 municipios del estado.
Este subsidio, vigente del 01 de abril al 31 de octubre de 2025, cubrirá hasta 1,200 kilowatts-hora por hogar, permitiendo un ahorro de hasta el 50% en el recibo de luz, especialmente durante la temporada de altas temperaturas. Este apoyo representa un alivio directo para la economía familiar, reduciendo significativamente el gasto mensual de los hogares sonorenses.
Una visión moderna y sustentable
Con la puesta en marcha de la planta y la ampliación del subsidio, Sonora se posiciona como líder en innovación energética, combinando tecnología de vanguardia con políticas públicas que promueven el bienestar ciudadano. Este enfoque refuerza la visión de un estado moderno que aprovecha sus ventajas naturales para generar un progreso sustentable.
La obra en Puerto Peñasco se perfila como un referente internacional en energías renovables, demostrando que los proyectos de gran escala pueden transformar la matriz energética de una región y, al mismo tiempo, impulsar la economía local y la creación de empleo. El impacto ambiental positivo es otro de los grandes beneficios: la reducción de 1.4 millones de toneladas de dióxido de carbono equivale a retirar de circulación más de 300,000 automóviles, convirtiendo a la planta en una pieza clave para la mitigación de la huella de carbono.
Así, el Plan Sonora de Energías Sostenibles integra dos vertientes: una apuesta por el desarrollo sustentable con la planta solar más grande de la región y una política social con el subsidio eléctrico que apoya directamente a las familias, construyendo un modelo energético incluyente y responsable. Con estos avances, Sonora reafirma su liderazgo como polo estratégico de energías limpias en México y América Latina, asegurando bienestar económico y ambiental para las presentes y futuras generaciones.