En un episodio de violencia extrema, un adolescente de 16 años resultó gravemente herido tras recibir un disparo en el abdomen durante una pelea entre bandas en Atocha, localidad salteña. El incidente ocurrió alrededor de las 5 de la mañana, cuando la fiesta se tornó en un enfrentamiento que involucró a cerca de 30 personas.
La secuencia de los hechos
La víctima fue trasladada de inmediato al Hospital San Bernardo por sus amigos, quienes lo auxiliaron tras el ataque. Su estado es delicado, y se espera una evaluación médica exhaustiva en las próximas horas debido a la gravedad de la herida. Inicialmente, las autoridades pensaron que el ataque podría haber sido un intento de robo, pero las investigaciones revelaron que se trató de un violento altercado en medio de la fiesta.
Según información proporcionada por El Tribuno, el conflicto estalló cuando un grupo intentó ingresar a la vivienda donde se celebraba el encuentro. La discusión rápidamente se convirtió en una agresión física, culminando con un disparo que hirió a la víctima. El reporte médico indica que el proyectil tenía orificio de entrada, pero no de salida.
Consecuencias del enfrentamiento
La violencia no cesó tras el disparo, ya que varios asistentes comenzaron a destrozar vehículos estacionados y propiedades cercanas, generando un ambiente caótico que se extendió por varios minutos antes de la llegada de la policía. Durante el operativo, las autoridades detuvieron a siete personas, entre ellas cinco adultos y dos menores de 16 y 17 años, involucrados tanto en el ataque como en los disturbios posteriores.
La Fiscalía Penal de Menores se encargará de la investigación para establecer la responsabilidad de cada involucrado y, sobre todo, identificar quién disparó el arma que dejó en estado crítico al joven. No se descartan nuevas detenciones en los próximos días, y se está analizando material audiovisual y testimonios para reconstruir detalladamente la secuencia de hechos.
Este triste episodio resalta la creciente ola de violencia que afecta a diversas localidades, y pone en evidencia la necesidad de implementar estrategias efectivas para la prevención de conflictos entre grupos, particularmente en el contexto de fiestas y reuniones sociales donde el descontrol puede llevar a consecuencias fatales.