La noche del 16 de octubre de 2023, un ataque a balazos cobró la vida de Susana, de 50 años, y su nieta Melanie, de apenas 10 años, en las calles de Xochimilco. Ambas viajaban en un Volkswagen Bora rojo, regresando de hacer compras cuando fueron interceptadas por sicarios, quienes dispararon sin piedad en el cruce de 16 de septiembre y Niños Héroes.
Un ataque planeado
Según reportes, Susana estaba bajo la mira de un grupo delictivo que había estado siguiendo sus movimientos durante meses. A pesar de haber intentado escapar de su vida anterior mudándose a Morelos hace seis años, regresaba a Xochimilco una vez a la semana para ver a sus familiares, lo que la convirtió en un blanco fácil. Ese fatídico día, su llegada fue detectada por los criminales, quienes decidieron ejecutar su plan.
Los agresores, que viajaban en una motocicleta, se emparejaron con el vehículo y comenzaron a disparar. En la escena del crimen quedaron seis casquillos de calibre 9mm, lo que indica la violencia con la que se perpetró el ataque. A pesar de la presencia de una menor, los sicarios no mostraron piedad, cumpliendo con su objetivo de eliminar a la líder de un grupo conocido como Los Susanos, vinculado al narcomenudeo en el sur de la Ciudad de México.
Investigación en marcha
Las autoridades han iniciado una carpeta de investigación por este doble homicidio, que apunta a un ajuste de cuentas. La realidad es que el crimen organizado sigue afectando a comunidades en la capital, y casos como el de Susana y Melanie son un triste recordatorio de la violencia que persiste en el país.
Este asesinato ha generado conmoción en la comunidad, donde muchos se preguntan qué se puede hacer para frenar la violencia y proteger a los ciudadanos. Las autoridades deberán actuar con rapidez para esclarecer los hechos y llevar a los responsables ante la justicia.
