El Gobierno palestino ha expresado su apoyo al informe emitido por una comisión de investigación de la ONU, que concluye que Israel está cometiendo actos de genocidio en la Franja de Gaza. Este informe, que ha sido calificado por las autoridades palestinas como una revelación contundente, sostiene que las acciones israelíes cumplen con los criterios establecidos en la Convención de 1948 sobre el genocidio.
Denuncias de genocidio y violaciones de derechos humanos
El Ministerio de Exteriores palestino destacó que el genocidio se lleva a cabo “a través de una política deliberada y generalizada destinada a destruir de forma sistemática al pueblo palestino”. En un comunicado publicado en su cuenta de la red social X, las autoridades señalaron que el informe documenta crímenes como asesinatos en masa, un bloqueo asfixiante, hambruna sistemática y ataques directos contra poblaciones vulnerables, incluyendo niños y mujeres.
Resulta impactante que el documento declare que las violaciones de derechos humanos constituyen “una dura advertencia desde el punto de vista del Derecho Internacional”, reflejando la gravedad de la situación en Gaza. Según el comunicado, “la ocupación ha cometido actos que constituyen los elementos fundamentales del crimen de genocidio”.
Responsabilidad internacional y demandas urgentes
Las autoridades palestinas han exigido a la comunidad internacional que asuma su “responsabilidad legal y moral” y actúe con urgencia para detener el genocidio. En este sentido, han solicitado medidas prácticas, como la imposición de sanciones a Israel y la cesación de todo tipo de apoyo militar y político hacia el país ocupante. “El silencio internacional ante estos atroces crímenes lo coloca en una posición de complicidad”, advirtieron.
El informe de la ONU también señala que los investigadores han determinado que las autoridades israelíes han cometido al menos cuatro de los cinco actos que se consideran genocidas según la convención mencionada. La situación en Gaza se vive como una catástrofe humanitaria que no puede ser ignorada, enfatizando la urgencia de un cambio en la respuesta internacional.
No cabe duda de que las conclusiones del informe han generado un creciente consenso internacional sobre la gravedad de los hechos en Gaza, lo que podría marcar un punto de inflexión en la manera en que se aborda este conflicto en el ámbito global.
