MORELIA, Mich., 8 de julio de 2025.- La danza se erige como una de las formas más efectivas de conexión humana, especialmente en el contexto de la rica tradición cultural latinoamericana. Así lo expone Carolina Murillo, docente de la Universidad Vasco de Quiroga (UVAQ), quien subraya la importancia de los ritmos latinos en la interacción social. Estos géneros, que incluyen la salsa, cumbia, bachata y merengue, no solo son parte de la identidad cultural, sino que también son vehículos para el establecimiento de relaciones interpersonales.
Murillo señala en un comunicado de prensa que “nuestra comunidad mexicana es fiestera, no podemos evitar que haya música, y cuando hay música el cuerpo lo sabe”. Esta afirmación refleja el papel central que la música y el baile desempeñan en la vida social, donde el movimiento se convierte en una forma de expresión y conexión entre las personas. La docente destaca que aquellos que carecen de habilidades para bailar pueden encontrar limitaciones en su capacidad para socializar y conectar con los demás.
“El que no sepas cómo moverte te limita, te impide ser tú, o relacionarte o a crecer, o tener cierto estatus”, agrega Murillo, enfatizando las desventajas que conlleva no participar en esta forma de expresión cultural. Esta perspectiva invita a repensar el baile no solo como un acto recreativo, sino como una herramienta esencial para el desarrollo personal y comunitario.
En este sentido, la profesora Murillo también menciona la oferta de un Taller de Ritmos Latinos en la UVAQ, que busca fomentar un ambiente de aprendizaje y seguridad corporal. “Un taller así permite otro nivel de seguridad corporal, de relación con los demás y de aprendizaje de diversas formas de danza y expresión corporal”, indica. Este enfoque no solo beneficia a quienes participan, sino que también enriquece la comunidad al promover un espacio donde la cultura y la interacción social se entrelazan.
La invitación a la comunidad es clara: practicar ritmos latinos no solo es una forma de entretenimiento, sino que también ofrece múltiples beneficios, tales como la liberación del estrés, la mejora de la autoestima y un impacto positivo en el estado de ánimo. “Siempre hay tiempo para aprender, y el saber bailar y comunicarte a través de ritmos latinos es una buena opción para relacionarte con las personas”, concluye Murillo, destacando la relevancia del baile en las interacciones cotidianas.
La importancia de los ritmos latinos se manifiesta no solo en su capacidad para unir a las personas en celebraciones, sino también en su potencial para fortalecer la identidad cultural y promover la salud emocional. Así, el baile se presenta como un puente efectivo para la relación humana, una invitación a moverse al compás de una cultura vibrante y rica en tradiciones.