El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha acusado este martes a Estados Unidos de someter a su país a una “guerra multiforme”, tras las afirmaciones del presidente estadounidense, Donald Trump, sobre la destrucción de tres embarcaciones venezolanas en el Caribe. Durante la presentación del Consejo Nacional por la Soberanía y la Paz, Maduro declaró que su nación está siendo “sometida, de manera inmoral”, y que esto constituye una violación del Derecho Internacional.
Denuncias y afirmaciones de Maduro
En su discurso, Maduro subrayó que Estados Unidos está llevando a cabo una amenaza “absolutamente repudiable, criminal e inmoral” contra Venezuela. Aseguró que el objetivo de esta agresión es apoderarse de las riquezas naturales del país a través de un cambio de régimen político. Sin embargo, el mandatario se mostró optimista y afirmó que Venezuela logrará “cabalgar” y “salir victorioso” de la situación actual, emergiendo “más fuerte, más pacífico, más democrático y más unido”.
Además, aunque no se refirió directamente a los ataques estadounidenses, mencionó que “Venezuela fue blanco de ataques por parte de submarinos nazis en el Caribe”, haciendo alusión a una historia de agresiones en el pasado. En este contexto, indicó que en el estado Zulia, los ataques incluyeron el hundimiento de más de 30 barcos y agresiones directas a instalaciones de refinación petrolera.
Reacción de Estados Unidos y sus implicaciones
Por su parte, Trump había indicado horas antes que el Ejército estadounidense había llevado a cabo un tercer ataque contra embarcaciones venezolanas, justificando estas acciones como parte de su política contra el narcotráfico. Aunque el Pentágono solo ha confirmado dos ataques recientes, Trump insistió en que “ha acabado con tres barcos, de hecho, y no dos”.
Estos ataques han intensificado las tensiones no solo entre Venezuela y Estados Unidos, sino también en el ámbito nacional. Congresistas estadounidenses han argumentado que no existe una amenaza directa de Caracas hacia Estados Unidos y que la legalidad de bombardear barcos no es válida, dado que no son considerados “objetivos militares” y los países involucrados no están en guerra.
La realidad es que la situación entre Venezuela y Estados Unidos sigue siendo tensa y compleja, con implicaciones que podrían afectar no solo a los dos países, sino también a la región en su conjunto. Maduro continúa defendiendo la soberanía de su país, mientras que las acciones del gobierno estadounidense generan un clima de incertidumbre y preocupación en el ámbito internacional.