En un acto de protesta que resonó en la Ciudad de México, alumnas de la Normal Rural Carmen Serdán de Teteles de Ávila Castillo acusaron a Mario Delgado Carrillo, titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), de negar el registro para matricular a las estudiantes que residen en el internado. La manifestación, que comenzó a las 12:00 horas en el Ángel de la Independencia, se centró en la preocupación de que se priorizará la entrada de aspirantes externos con recursos económicos, dejando a las estudiantes vulnerables sin oportunidades.
Las normalistas, que se agruparon en defensa de sus derechos, ofrecieron una rueda de prensa en las inmediaciones del zócalo capitalino después de las 19:00 horas. En su declaración, denunciaron que más de 600 elementos policiacos impidieron su acceso a la Plaza de Armas, un acto que consideran una violación a su derecho a la libre expresión.
Acuerdos incumplidos y vigilancia constante
Las jóvenes manifestaron que el secretario, junto con Ricardo Villanueva Lomelí, subsecretario de Educación Superior, y Julio César Leyva Ruiz, director General de Educación Superior, rompieron un acuerdo firmado para asegurar el registro de las alumnas del internado. Este acuerdo, que data de 2023, tenía como objetivo fortalecer la matrícula interna y eliminar la modalidad externa que consideran perjudicial.
Además, las normalistas informaron sobre una campaña de acoso en su contra, con vigilancia policiaca en las afueras del plantel y el sobrevuelo de drones. Este ambiente de hostigamiento ha generado una atmósfera de temor entre las estudiantes que se dedican a su formación académica y que luchan por sus derechos.
Reacciones y acuerdos previos
La situación ha generado controversia, especialmente tras la reciente divulgación de que la SEP estatal llegó a varios acuerdos en una mesa de diálogo con las estudiantes, incluyendo una visita a su plantel con la supervisión de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Puebla. Sin embargo, hasta el momento, las normalistas no han desmentido la versión oficial sobre los diálogos, lo que añade un elemento de incertidumbre a la situación.
La realidad es que la lucha de las alumnas de la Normal Rural Carmen Serdán no solo refleja su deseo de mantener su lugar en el internado, sino también una batalla más amplia por la justicia y el reconocimiento de sus derechos en un sistema educativo que a menudo les da la espalda.