Las investigaciones sobre la dana del 29 de octubre han regresado con una notable falta de ritmo y, lo que es más preocupante, sin la presencia de las víctimas que han sufrido las consecuencias de esta tragedia. Desde el regreso del periodo de sesiones tras el verano, las tres comisiones parlamentarias —Senado, Congreso y Corts— han demostrado que el tiempo en política es relativo, y la celeridad en sus trabajos ha dejado mucho que desear.
Un inicio de curso marcado por la inacción
Las comisiones abiertas en cada una de las cámaras han comenzado sus actividades con juntas de portavoces y plenos, pero esto ha resultado en una simple exposición de la ineficacia institucional. A pesar de que se han convocado sesiones, el avance en la investigación es desigual y las víctimas siguen sin poder aportar su testimonio. En el Senado, donde el PP tiene mayoría absoluta, la próxima sesión está programada para el jueves, con la comparecencia de José Trigueros, presidente de la Asociación de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, quien enfocará la responsabilidad en la falta de infraestructuras hidráulicas.
En julio, se aprobó la inclusión de 70 comparecientes más, muchos de ellos vinculados al Gobierno central, lo que ha desviado la atención de la Generalitat y de figuras como Carlos Mazón. Esta estrategia ha generado críticas sobre el manejo de la investigación.
Desafíos en las Corts y el Congreso
La situación en las Corts es aún más crítica, con apenas una sesión celebrada en julio, la cual se transformó en una clase magistral de ingeniería. La parlamentaria del PSPV, Alicia Andújar, ha solicitado a la presidenta del parlamento, Llanos Massó, que rompa el “bloqueo” que considera que están llevando a cabo el PP y Vox al no responder a sus solicitudes de convocar reuniones del órgano de investigación. Sin embargo, la falta de respuesta ha llevado a la frustración, y no se anticipa que se realice otra sesión antes de finales de septiembre o inicios de octubre.
En contraste, la situación en el Congreso es desalentadora, ya que esta comisión, presidida por la izquierda, aún no ha celebrado ninguna comparecencia. El retraso en su constitución se debió a la imposibilidad de coincidir con más de tres comisiones de investigación, pero esto no justifica la falta de un plan de trabajo que permita investigar la tragedia de manera efectiva.
Fuentes dentro del Congreso indican que se espera cerrar un acuerdo entre el PSOE, el Grupo Plurinacional de Sumar y el Grupo Mixto esta semana, lo que permitiría iniciar el proceso de citaciones. Sin embargo, el compromiso es que las víctimas sean las primeras en declarar, una promesa que aún está por cumplirse.
A medida que avanza el tiempo, las diferencias en el manejo de las comisiones en el Senado, Congreso y Corts se hacen más evidentes, lo que resalta la urgencia de un enfoque más coordinado y eficaz para abordar la tragedia del 29 de octubre.
La falta de respuesta y acción concreta por parte de las instituciones ha dejado a las víctimas en un limbo, donde el tiempo sigue corriendo sin que se vislumbre un cambio real en la dirección de la justicia y la verdad.