La fiesta ‘rave’ ilegal que se lleva a cabo desde el viernes en la cantera de Roiz, ubicada en el municipio de Valdáliga, ha comenzado a perder asistentes. Este evento, al que llegaron cerca de 400 personas, se ha visto afectado por la presencia de la Guardia Civil, que continúa realizando controles en la zona.
Según reportes de la Delegación del Gobierno a Europa Press, alrededor de medio centenar de personas ya han abandonado el lugar y se espera que el flujo de salida continúe durante la tarde y noche de hoy, así como mañana. La fiesta fue convocada a través de redes sociales y carecía de la debida autorización.
Operativo de la Guardia Civil
Al detectar la convocatoria, la Guardia Civil implementó un operativo a las 7:00 horas de este sábado con el objetivo de impedir el acceso de más personas a la fiesta. Durante el día, las autoridades han llevado a cabo controles de drogas y alcohol a aquellos que salían del evento. Este tipo de acciones buscan salvaguardar la seguridad y el orden público en la región.
La Delegación del Gobierno ha recordado que los organizadores de la fiesta pueden enfrentarse a sanciones que alcanzan hasta los 600,000 euros, mientras que los participantes podrían recibir multas que varían desde los 150 hasta los 30,000 euros.
Consecuencias legales y demandas
Además de las multas, la empresa concesionaria de la cantera ha interpuesto una demanda por la ocupación ilegal del espacio, lo que podría complicar aún más la situación para los organizadores y asistentes. Este acontecimiento pone de manifiesto la creciente preocupación de las autoridades por la celebración de eventos sin permisos en el país.
La realidad es que eventos como este no solo representan un riesgo para la seguridad pública, sino que también pueden resultar en serias repercusiones legales para quienes participan y organizan sin la debida autorización. La situación en la cantera de Roiz es un claro ejemplo de cómo la vigilancia y el cumplimiento de la ley siguen siendo prioridades para las autoridades en México.