Las comunidades de la barranca del río Santiago, en el municipio de Zapopan, están alzando la voz ante el abandono que sufren por parte de los gobiernos federal y estatal. Este 22 de agosto, un grupo de comuneros de Ixcatán, una localidad con historia precolombina y refundada en 1530, se presentó en Palacio Nacional para entregar un pliego petitorio que contiene siete cuartillas con exigencias fundamentales para mejorar su calidad de vida.
Demandas esenciales para el desarrollo
Entre sus principales solicitudes, los habitantes de Ixcatán piden acceso a agua potable para sus familias, la creación de una universidad “Benito Juárez” para brindar educación superior a los jóvenes y el establecimiento de una Casa de la Cultura que incluya un museo local. José Casillas Martínez, presidente del Comisariado de Bienes Comunales de San Francisco Ixcatlán, expresó la urgencia de estas demandas: “Exponemos necesidades de carácter agrario y medioambiental que el gobierno federal debe atender”.
El tema ambiental es una de las prioridades más apremiantes. Los comuneros demandan la intervención de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Secretaría de Energía para frenar la contaminación de los ríos Milpillas, La Soledad, Los Camachos y Blanco-Cola de Caballo, que han sido severamente afectados por la actividad humana y el desinterés gubernamental.
Las consecuencias del olvido
Los basureros de Picachos y El Taray, este último cerrado desde hace años, junto con las descargas de aguas residuales de desarrollos habitacionales como Valle de los Molinos, Ara, Mirador del Bosque y Monticello, son las principales fuentes de contaminación. “Tendremos una asamblea de comuneros para discutir estrategias que nos ayuden a que nuestras demandas sean escuchadas y atendidas”, añadió Casillas, resaltando la necesidad de que el gobierno no solo reconozca la riqueza biológica e histórica de la barranca, sino también a sus habitantes que llevan años en el abandono.
Además de Ixcatán, otros pueblos que sufren la falta de atención de las autoridades son San Esteban, San Isidro, Tateposco, Río Blanco, Hacienda de Lazo, Los Camachos, Paso de Guadalupe, Milpillas, San Lorenzo, Huilotán y Huaxtla. La situación se vuelve cada vez más crítica y los habitantes esperan que su mensaje llegue a quienes tienen el poder de generar un cambio significativo en sus vidas.
