Ciudad de México.— La actriz Erika Buenfil compartió un video en TikTok para denunciar el robo que sufrió su hijo, Nicolás, y su sobrino, Alejandro, en la Plaza Mitikah, un popular centro comercial ubicado al sur de la CDMX. El incidente ocurrió tras una visita a un restaurante japonés en la plaza, donde los jóvenes dejaron las computadoras en el automóvil, pensando que estarían seguras en el estacionamiento.
Detalles del robo
En el video, Buenfil relató cómo, luego de salir de trabajar, se dirigieron a la plaza con la intención de disfrutar de una comida. “Resulta que saliendo de trabajar me fui con mi sobrino Alejandro y con Nicolás a Mitikah. Nos gusta mucho un restaurante que está ahí”, explicó. A pesar de haber dejado sus pertenencias en el auto, al regresar se dieron cuenta de que las computadoras habían desaparecido.
“Cuando llegamos a la camioneta no nos percatamos que las computadoras no estaban”, continuó la actriz. La situación se tornó más complicada cuando intentaron buscar ayuda de la seguridad de la plaza, quienes no ofrecieron el apoyo esperado. “El problema no es que les hayan robado las computadoras, el problema es que la seguridad no ayudó en nada”, comentó con evidente frustración.
La falta de apoyo de la seguridad
Buenfil destacó que la respuesta del personal de seguridad fue deficiente, ya que, en lugar de ayudar a sus hijos, les hicieron múltiples preguntas y no facilitaron el acceso a las cámaras de seguridad. “Les ponían una traba tras otra y se pasaban la pelota uno a otro”, lamentó. A pesar de que la computadora de Nicolás estaba conectada al celular, fue imposible rastrear el dispositivo antes de que se apagara.
La actriz enfatizó que, aunque se comprende que no se deben dejar equipos valiosos en los autos, la confianza en la seguridad de una plaza moderna como Mitikah no debería ser un problema. “Entendemos que no se deben llevar aparatos, pero también estas plazas tan modernas y tan llenas de cosas de pronto uno olvida la chamarra, deja cosas en el carro y no se siente uno seguro en ninguna parte”, reflexionó.
Finalmente, Buenfil expresó su decepción por la situación: “La camioneta estaba intacta, no hay un cristalazo, una puerta forzada. Yo creo que lo saben hacer muy bien y es todo. Mitikah, qué decepción”. Este incidente ha abierto un debate sobre la seguridad en los espacios públicos y la responsabilidad de los centros comerciales para garantizar la protección de sus visitantes.
