Jenna Ortega, la joven actriz de 22 años, ha compartido sus reflexiones sobre su personaje en la exitosa serie *Merlina* y sus raíces culturales en una reciente entrevista para la portada de *Vogue*. A través de su carrera, Ortega ha demostrado una conexión profunda con su herencia latina, destacando cómo su crianza en California ha moldeado su identidad y su enfoque hacia la actuación.
Una infancia marcada por la actuación
Desde pequeña, Jenna sentía una fascinación por la actuación que la llevó a imitar a actores como Dakota Fanning y Haley Joel Osment. En su camino hacia el estrellato, recuerda: “Sentía que si no actuaba, me iba a enfermar”. A pesar de la resistencia inicial de su madre, Ortega se comprometió a seguir su pasión, logrando sus primeros papeles en producciones como *Iron Man 3* y *La noche del demonio: capítulo 2*.
La verdadera oportunidad llegó con su papel en la serie *You* en 2019, donde interpretó a Ellie Alves. Este personaje complejo le abrió puertas a roles más significativos, culminando en su icónico papel en *Merlina*, que se estrenó en 2022 y rápidamente se convirtió en un fenómeno global, alcanzando el número uno en 90 países y superando mil millones de horas vistas en solo tres semanas.
La experiencia de ser Merlina
El éxito de *Merlina* ha traído consigo una nueva presión y atención. Ortega admite que hay un peso diferente que conlleva la fama, pero también la inspira a explorar más profundamente su papel. La actriz se sumerge en la creación de sus personajes, buscando referencias en el cine mudo y observando a las personas en su entorno. Para *Merlina*, se inspiró en el rostro inexpresivo de Buster Keaton.
Además de actuar, Ortega ha asumido un rol de productora, lo que le ha permitido tener un impacto directo en la creación de la serie. “Es realmente emocionante ver las conversaciones creativas y todo lo que implica preparar un episodio”, comenta. Su trabajo detrás de cámaras incluye asegurar un ambiente seguro y eficiente para el equipo, supervisando el proceso de marketing y lanzamiento de la serie.
Reflexiones sobre la identidad y la cultura
A pesar de su éxito, Ortega mantiene una relación cautelosa con su identidad latina, reconociendo la presión de representar una comunidad diversa. “Crecí en un entorno mayoritariamente latino y es fundamental para mi identidad”, explica. Aunque se siente orgullosa de sus raíces mexicanas y puertorriqueñas, también enfrenta el desafío de no haber crecido en un país de habla hispana: “Es difícil para mí no poder hablar español, y me esfuerzo. Pero soy muy insegura al hablar y no quiero ofender a nadie”.
Jenna está consciente de la importancia de su voz en la industria del entretenimiento, afirmando que ser joven y asertiva puede ser intenso. “Siempre he sabido lo que es no tener voz y eso me aterra”, dice, enfatizando la importancia de expresarse de manera profesional y amable.
Con nuevos proyectos en el horizonte, incluyendo *The Gallerist* junto a Natalie Portman y la adaptación de *Klara and the Sun* de Taika Waititi, Jenna Ortega continúa consolidándose como una figura relevante en Hollywood. La confirmación de una tercera temporada de *Merlina* refuerza su conexión con el personaje que la ha catapultado a la fama, y aunque reconoce que a veces la confunden con ella, no le molesta en absoluto.
A medida que avanza en su carrera, Ortega se siente más clara y segura de hacia dónde quiere ir, una señal de que sigue por un camino prometedor en el mundo del cine.
