Las personas que padecen diabetes, problemas digestivos o deficiencias vitamínicas enfrentan un riesgo significativamente mayor de desarrollar enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y el Parkinson, incluso años antes de ser diagnosticadas. Así lo revela un estudio internacional realizado por investigadores de Estados Unidos, Reino Unido, España y Brasil, publicado en la revista Science Advances.
Hallazgos reveladores sobre enfermedades neurodegenerativas
Según el análisis, algunas condiciones de salud pueden aumentar hasta cinco veces la probabilidad de que una persona desarrolle Alzheimer o Parkinson, incluso si aún no presenta síntomas. Los científicos examinaron datos de importantes biobancos como UK Biobank, SAIL y FinnGen, que contienen la información médica de más de 500,000 personas.
“Detectamos que el riesgo de una enfermedad neurodegenerativa ya está presente más de una década antes del diagnóstico”, afirmaron los investigadores. Este hallazgo sugiere que, si un médico identifica problemas metabólicos o digestivos, se podrían implementar estrategias para monitorear la salud cerebral antes de la aparición de complicaciones más graves.
Investigación sobre enfermedades metabólicas y su relación con Alzheimer y Parkinson
El objetivo del estudio fue determinar si dolencias comunes pueden ser indicadores anticipados de Alzheimer o Parkinson. Anteriormente, los médicos se enfocaban en factores genéticos y síntomas que se presentaban cerca del diagnóstico. El equipo de investigadores cuestionó si las enfermedades digestivas, metabólicas y endocrinas influían en la probabilidad de desarrollar estas condiciones en el futuro.
Los resultados fueron contundentes: las personas con diabetes no especificada hasta 15 años antes del diagnóstico de Alzheimer tenían más de tres veces más riesgo de desarrollar la enfermedad en comparación con quienes no la padecían. Además, los trastornos graves del colesterol aumentaron el riesgo de Alzheimer hasta casi seis veces en el biobanco FinnGen.
“Las enfermedades digestivas también aumentan el peligro, aunque el efecto es menor que en los trastornos metabólicos graves”, señalaron los autores del estudio. Para el caso del Parkinson, la diabetes insulinodependiente duplicó el riesgo, mientras que los déficits de vitaminas del grupo B aumentaron el riesgo en un 57%.
El estudio subraya la importancia de una salud metabólica adecuada, ya que encontrar estos riesgos tan claros podría cambiar el futuro del tratamiento y prevención de enfermedades neurodegenerativas. Sin embargo, los investigadores reconocen que el estudio tiene limitaciones, ya que los datos provienen principalmente de poblaciones europeas y la calidad de la información médica varía según el país y el biobanco.
Los autores concluyen que el próximo paso será explorar si un manejo adecuado de estas enfermedades tempranas puede disminuir el riesgo de Alzheimer y Parkinson. “Investigar la vía intestino-cerebro dará pistas clave para diagnósticos y prevenciones más eficaces”, afirmaron. Este estudio fue financiado por los Institutos Nacionales de Salud y el Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos, entre otros organismos.
