Ayer, el Paseo de la Reforma se convirtió en un vibrante escenario para los amantes del ciclismo y el patinaje, quienes participaron en el Paseo Nocturno por Día de Muertos. Este evento atrajo a una gran cantidad de personas, creando un ambiente festivo a lo largo de la famosa avenida de la Ciudad de México.
A pesar de que la alta afluencia de participantes generó cierto caos en algunas áreas de la ruta, los asistentes disfrutaron de la música y los coloridos elementos que adornaban su recorrido. La celebración del Día de Muertos, una tradición profundamente arraigada en la cultura mexicana, se reflejó en cada rincón del evento, creando una experiencia única para los pedalistas y patinadores.
La participación masiva en este evento destaca el interés creciente de la población por actividades que fomentan la convivencia y la celebración de las tradiciones mexicanas. El Paseo Nocturno por Día de Muertos no solo ofrece una oportunidad para disfrutar del deporte, sino también para rendir homenaje a aquellos que han partido, en un ambiente lleno de vida y color.
Así, el Paseo de la Reforma se vistió de fiesta, convirtiéndose en un espacio de celebración y recuerdo, donde la comunidad se unió para conmemorar esta importante festividad. La combinación de pedalistas y patinadores, junto con la música y los decorados, hizo de este evento una experiencia memorable para todos los asistentes.
































































