La final de “La Casa de los Famosos México” tuvo lugar el domingo pasado, marcando el cierre de una emocionante tercera temporada. Durante más de 70 días, los participantes estuvieron aislados, sin contacto con el exterior, lo que intensificó la experiencia para todos. La noche culminante fue intensa, con los cinco finalistas eliminados uno tras otro.
Sin embargo, el momento más controvertido llegó con la salida de Abelito, quien fue uno de los favoritos del público. A pesar de su popularidad en redes sociales y su conexión con la audiencia, quedó en tercer lugar. La victoria fue para Aldo de Nigris, seguido por Dalilah Polanco.
Desde el inicio del programa, el joven de Zacatecas se destacó por su humor y su cercanía con otros concursantes, especialmente con Ninel Conde, creando una dupla que cautivó a los espectadores hasta que ella fue eliminada en la tercera semana. Posteriormente, continuó su participación junto a Facundo, aunque no sin controversias, ya que algunos de sus chistes fueron considerados inapropiados por otros concursantes.
La sorpresa de la noche fue palpable cuando Abelito fue anunciado en el tercer lugar. Las cámaras enfocaron a su padre, quien mostró una expresión seria y movió la cabeza en señal de desaprobación, lo que generó especulaciones sobre su reacción.
Al salir del foro, el padre de Abelito fue abordado por los medios, quienes le preguntaron sobre su expresión. Con sinceridad, él aclaró: “Yo le mando saludos a todo el público y no malinterpreten las cosas. Yo sentí tristeza, como todo el mundo puede comprenderme, ¿verdad? Pero no enojo, enojo jamás. Triste, poquito”. Asimismo, destacó que ya se había preparado para este resultado y que para él, su hijo ya era un ganador sin importar su posición final: “Ya estamos hechos a la idea. El Abelito salió ganador, no hay que malinterpretar las cosas”.