Rusia ha anunciado un respaldo decisivo a China en su esfuerzo por “sobrepasar” el “potencial nuclear” de Estados Unidos en energía atómica. Este compromiso fue expresado este miércoles por Alexei Lijachev, director de la empresa estatal rusa Rosatom, quien detalló que la cooperación busca incrementar significativamente las capacidades energéticas de Pekín.
Cooperación nuclear entre Rusia y China
Lijachev explicó que el objetivo es que China alcance una capacidad superior a los 100 gigavatios generados por Estados Unidos, lo que implicaría un avance considerable en sus planes nucleares. “Estamos ya ayudando en esto”, afirmó, al señalar que Rusia ha contribuido a la construcción de cuatro reactores nucleares en territorio chino y está preparando la edificación de otros cuatro.
No obstante, el funcionario ruso reconoció que Pekín requerirá grandes cantidades de uranio y combustible nuclear para implementar estos planes. Este hecho resalta la posibilidad de una “cooperación nuclear pacífica entre los dos países durante siglos”, lo que podría cambiar el panorama energético en la región y a nivel global.
Implicaciones geopolíticas
Este acercamiento entre Rusia y China no es casual, ya que se da en un contexto de tensiones crecientes entre estas naciones y Estados Unidos. La realidad es que el fortalecimiento de sus capacidades nucleares podría alterar el equilibrio de poder en el ámbito internacional. La colaboración en energía atómica podría permitir a China no solo aumentar su independencia energética, sino también posicionarse como un competidor más fuerte en el escenario global.
Así, la alianza entre Rusia y China en el sector nuclear se perfila como un movimiento estratégico que podría tener repercusiones significativas, tanto a nivel regional como mundial. Con esta asociación, ambos países buscan no solo avanzar en sus capacidades energéticas, sino también desafiar la influencia de Estados Unidos en el ámbito nuclear.