El fin de semana del 13 de septiembre se presenta con temperaturas casi veraniegas y la amenaza de fuertes tormentas en varias provincias, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). La situación climática en España muestra un contraste notable entre el calor en el centro y sur de la península y las lluvias que han afectado al nordeste del país.
Temperaturas altísimas y lluvias intensas
Rubén del Campo, portavoz de la Aemet, destacó que se esperan temperaturas que alcanzarán niveles “prácticamente de verano” en la mayor parte del centro y sur del país. En particular, las máximas oscilarán entre 34 y 36 grados en el interior de la Comunidad Valenciana y la Región de Murcia, así como en el valle del Guadalquivir. Por otro lado, Cádiz y Sevilla se enfrentarán a avisos amarillos por altas temperaturas, con valores que podrían llegar hasta los 38 grados en las campiñas.
Las lluvias, que han sido una constante durante la semana, continuarán afectando a zonas de los Pirineos, Cataluña, el sur de Aragón y el norte de la Comunidad Valenciana. En Barcelona, el nivel de alerta por tormentas disminuyó de naranja a amarillo, pero esto no significa que la situación esté resuelta, ya que se anticipan precipitaciones significativas con la posibilidad de granizo y rachas de viento muy fuertes.
Perspectivas para el domingo y principios de la próxima semana
El domingo, se prevé que los vientos húmedos provenientes del Mediterráneo cubran los cielos, generando lluvias débiles en el área mediterránea y algunas lloviznas en Galicia. Sin embargo, el calor persistirá, especialmente en el área cantábrica, donde se esperan temperaturas cercanas a los 30 grados en ciudades como Bilbao.
El inicio de la próxima semana también se anticipa caluroso, con temperaturas entre 5 y 10 grados por encima de lo normal, sobre todo en el centro y sur del país. A pesar del descenso en el área cantábrica, el resto de España seguirá experimentando un clima cálido y seco, lo que plantea inquietudes sobre posibles sequías en las regiones más afectadas.
La situación climática subraya la importancia de estar alerta ante los cambios repentinos del tiempo, pues la combinación de calor extremo y lluvias intensas puede traer consigo serias complicaciones. Los ciudadanos deben seguir las recomendaciones de la Aemet y mantenerse informados sobre las actualizaciones meteorológicas.
