Desde este lunes, la estación Uruguay de la Línea B del subte en la Ciudad de Buenos Aires quedará cerrada por un período estimado de tres meses, según anunció Subterráneos de Buenos Aires S.E. (SBASE). Esta medida forma parte de un plan de remodelación integral que busca modernizar la infraestructura y mejorar la experiencia de los pasajeros.
Detalles de la remodelación
Entre las obras que se llevarán a cabo destacan la pintura, el reemplazo de pisos y la instalación de luminarias LED. Además, se actualizará la cartelería, se incorporará señalización en braille y se renovará el mobiliario en los andenes. También se realizarán trabajos de impermeabilización utilizando materiales innovadores para garantizar la durabilidad de la estación.
Otra acción relevante es la restauración y preservación de cuatro murales históricos que adornan el vestíbulo y andén de la estación Uruguay, tarea que será realizada por especialistas en conservación patrimonial. Esta remodelación se suma a otros cierres temporales de estaciones en la Línea B y la Línea D, incluyendo a Carlos Gardel, Plaza Italia y Agüero.
Impacto en la red del subte
SBASE ha indicado que este proyecto es parte de un programa más amplio de modernización que ya ha abarcado once estaciones en diferentes líneas. Estaciones como Castro Barros y Lima en la Línea A, y Pueyrredón en la Línea B, también han recibido intervenciones significativas.
A medida que avanza el cronograma de obras, se planean nuevas mejoras en otras estaciones como Loria y Malabia, mientras que los procesos licitatorios para renovar otras paradas continúan en marcha. Este esfuerzo busca ofrecer espacios más seguros y confortables para los miles de usuarios que diariamente utilizan la red.
Un aspecto importante de esta modernización es la reciente licitación para la compra de 174 nuevos vagones a la empresa china CRRC Changchun Railway Vehicles Co. Ltd. Esta inversión de 301 millones de dólares representa la mayor renovación de flota en la última década y se espera que los nuevos trenes empiecen a circular en el primer trimestre de 2027.
Con estas mejoras, se busca optimizar la frecuencia y elevar los estándares de seguridad y confort, beneficiando a más de 270,000 usuarios diarios que utilizan la Línea B. Cada nuevo coche contará con aire acondicionado, iluminación LED antivandalismo y sistemas avanzados de señalización, asegurando una experiencia de viaje más placentera.
