En un contexto donde la inflación afecta el poder adquisitivo de las familias mexicanas, es crucial aprender a gestionar las finanzas personales. El economista y asesor financiero David Forcada ha compartido en su perfil de TikTok los errores más comunes que comete la gente al manejar sus ingresos y patrimonio. Su objetivo es fomentar una administración más consciente y eficiente de los recursos.
Errores comunes en la gestión financiera
Forcada destaca que muchas personas caen en fallos básicos que pueden limitar el crecimiento de su patrimonio. Uno de estos errores es “dejar el dinero parado”, lo que significa mantener los ahorros en una cuenta no remunerada. “Si ahorras y los tienes en una cuenta que no remunera, con el mismo riesgo que tenerlos en una cuenta, los puedes tener en otra que sí remunere”, explica. La recomendación es buscar alternativas bancarias que ofrezcan intereses o realizar depósitos a plazo que compensen, al menos en parte, el efecto de la inflación.
Otro error significativo es la ausencia de planificación. Forcada enfatiza la importancia de “casar tus objetivos con el tipo de inversión que hagas”. Para quienes piensan en su jubilación, sugiere elegir productos financieros adecuados según el horizonte temporal. “Si tu jubilación es a 15 años vista, dedica tiempo a aportar con productos de renta variable”, señala, destacando la necesidad de una visión a largo plazo.
El asesor también comenta que existe una creencia errónea de que invertir es solo para personas con grandes fortunas. “Pensar que invertir es para los ricos es un mito. Hay productos en los que puedes invertir desde un euro”, recalca. Esta democratización en el acceso a las inversiones abre posibilidades para quienes buscan preservar y potenciar su capital, independientemente de su punto de partida.
La importancia de actuar y no esperar el momento perfecto
Forcada menciona que otro error frecuente es comprar por presión social o dejarse llevar por las modas. La formación de un portafolio de inversión debe responder a un análisis personal y a los objetivos individuales, no a lo que otros hacen. “Si tienes un plan y unos objetivos definidos, puedes empezar a invertir, pero no porque el vecino lo dice”, sostiene.
Un factor adicional es la tendencia de muchos ahorradores a esperar el “momento perfecto” para invertir. “Nunca llegará. Siempre habrá un evento que nos hará pensar que no es el momento”, advierte. Desde su perspectiva, las circunstancias externas y la volatilidad del mercado no deben ser excusas para la parálisis, ya que la economía sigue avanzando a pesar de los ciclos de incertidumbre. “El mejor momento para invertir es ayer; su mejor momento es hoy”, concluye.