La conductora peruana Magaly Medina ha encendido una nueva polémica tras criticar con dureza al cantante venezolano Guillermo Dávila, a quien acusa de haber utilizado a su hijo, Vasco Madueno, para captar público en sus recientes presentaciones. Durante la última edición de su programa Magaly TV La Firme, Medina no escatimó en palabras para expresar su indignación.
Un pasado doloroso
Medina recordó el arduo proceso que vivió la madre de Vasco para lograr que Dávila lo reconociera legalmente como su hijo, un camino lleno de sufrimiento y obstáculos. “Hay una cosa que me desagrada de Guillermo Dávila… lo que a mí me cae mal es esa postura que tuvo: el hacer sufrir a Vasco y a su madre por muchos años”, expresó con firmeza, dejando claro que no se trataba de un simple desacuerdo artístico.
La Urraca, como se le conoce, enfatizó que su crítica no es una cuestión de frivolidades ni de talento, sino de la calidad humana del artista. Recordó cómo su equipo fue testigo del “viacrucis” legal que enfrentó la madre de Vasco, quien incluso padeció cáncer durante el proceso de reconocimiento. “Nosotros acompañamos a la madre de Vasco en largos procesos, una mujer que se enfermó de cáncer luego de buscarle un apellido legal para su hijo”, añadió Medina, resaltando la dureza del corazón de Dávila en esos momentos difíciles.
Hipocresía y reconciliación
La reciente reconciliación entre Dávila y Vasco generó escepticismo en Magaly. “Ahora recién se quiere mostrar como dadivoso, amoroso, con ese hijo que negó”, comentó, sugiriendo que este acercamiento es más una estrategia para llenar escenarios que una verdadera expresión de paternidad. Medina fue clara en que el gesto del cantante le pareció oportunista, un intento de ganar simpatía en un momento conveniente.
El caso de Guillermo Dávila y Vasco Madueno ha sido uno de los más mediáticos en Perú, donde Vasco creció rodeado del amor incondicional de su madre, pero con la ausencia de su padre biológico. Fue solo tras años de batallas legales y presión mediática que Dávila finalmente reconoció su paternidad. Sin embargo, para Magaly, esos recuerdos no pueden ser borrados por un par de gestos públicos.
“No es un tema de farándula, es una cuestión humana. Porque ese chico sufrió, y su madre también sufrió. No me vengan ahora con que todo fue un malentendido o que ahora el artista es el padre amoroso. No lo creo”, insistió. Para ella, es inaceptable que se intente reescribir la historia bajo un aire de reconciliación tardía.
Magaly concluyó con una reflexión que resuena en la memoria colectiva: “La gente merece recordar la verdad, porque si nos olvidamos tan rápido de lo que pasó, estamos validando la indiferencia, el abandono y la frialdad. Eso no puede ser”. Su declaración deja claro que, en su perspectiva, la lucha de Vasco y su madre no debe ser olvidada ni trivializada.