El pequeño pueblo de Melide, en A Coruña, ha hecho historia al romper su propio récord al preparar la tortilla de patatas más grande del mundo, un evento que ha puesto su nombre en los titulares. Este domingo, la localidad galaica, que cuenta con aproximadamente 7,500 habitantes, utilizó la asombrosa cifra de 17,000 huevos, 2,000 kilos de patatas, 300 litros de aceite y 30 kilos de sal para cocinar una tortilla gigante en una sartén de seis metros de diámetro.
Un reto culinario sin precedentes
La hazaña se llevó a cabo durante la segunda edición de la Feria del Huevo Campero, organizada por la empresa familiar El Huevo de la Abuela, que no solo celebró la gastronomía local, sino que también fomentó un espíritu comunitario. Unas 75 personas se unieron al desafío culinario, que comenzó a las 11:00 horas, y que culminó con el emocionante momento del volteo de la tortilla, que mantuvo a todos los presentes en vilo.
Este año, la tortilla se preparó en dos versiones para satisfacer todos los gustos: una mitad con cebolla y otra sin ella, resolviendo así el eterno debate de los ‘concebollistas’ y ‘sincebollistas’. Con un total de 10 toneladas de tortilla, el evento no solo fue un espectáculo visual, sino también una oportunidad para recaudar fondos, ya que se vendieron 12,000 raciones a tres euros cada una, destinando lo recaudado a comedores sociales y entidades benéficas.
Reconocimiento gastronómico
La provincia de A Coruña no solo se destaca por tener la tortilla más grande del mundo, sino que también alberga a la que es considerada la mejor. El chef Ramón Rodríguez, del restaurante O Cabo, ganó el primer premio en el concurso gastronómico anual de Alicante Gastronomía a finales de 2024 con su tortilla, que se caracteriza por su sencillez y un sabor inigualable.
La combinación de tradición y creatividad ha colocado a Melide en el mapa gastronómico de España, y su tortilla se ha convertido en un símbolo de unidad y orgullo para la comunidad. Este evento anual no solo celebra la rica cultura culinaria de la región, sino que también reafirma el compromiso de los melidenses por seguir innovando y destacando en el ámbito gastronómico.