El ministro de Justicia de Colombia, Eduardo Montealegre, reafirmó la importancia de continuar con los procesos de paz, incluso tras los recientes atentados perpetrados por grupos armados. En el programa de entrevistas Desnúdate con Eva, el funcionario enfatizó que los actos de violencia no deben ser un impedimento para avanzar en la política de Paz Total del gobierno del presidente Gustavo Petro.
Montealegre hizo referencia a los recientes ataques, incluyendo el atentado que sufrió el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay en Bogotá el 7 de junio de 2025, que culminó en su muerte el 11 de agosto. También mencionó el ataque del 21 de agosto por parte del ELN en Amalfi, Antioquia, que dejó un saldo de 13 policías asesinados. Esta serie de eventos ha generado un clamor por detener las negociaciones con los grupos armados, algo que Montealegre considera un error.
Los sacrificios en el camino hacia la paz
Según el ministro, aunque los atentados provocan dolor e indignación, no pueden ser utilizados como argumento para frenar las negociaciones. “Si cada atentado significara suspender o acabar un proceso de paz, nunca lograríamos culminar uno”, explicó. Aseguró que estos eventos son parte de los “sacrificios” necesarios en la búsqueda de la paz, y que es crucial no desistir en el objetivo de una solución negociada al conflicto.
El ministro recordó el proceso de paz del gobierno del expresidente Juan Manuel Santos, que culminó con la firma del Acuerdo Final de Paz con las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc-EP) en 2016. A pesar de los atentados y la violencia que acompañaron esas negociaciones, se logró un avance significativo que permitió la entrega de armas por parte de los combatientes y el compromiso de reparar a las víctimas.
Desafíos actuales para la paz
Montealegre subrayó las diferencias contextuales entre el gobierno de Santos y el actual de Petro, señalando que hoy en día se están negociando con más de ocho grupos armados, muchos de los cuales no presentan una estructura jerárquica clara. “En este momento, los grupos son distintos y requieren un enfoque diferente”, afirmó. Esto plantea un reto adicional para la administración actual, que enfrenta críticas por su enfoque en la resolución del conflicto.
Para facilitar estos acercamientos, el Ministerio de Justicia ha presentado un proyecto de ley que busca establecer un marco jurídico para la Paz Total, con el fin de avanzar en las negociaciones de manera estructurada y efectiva. Montealegre destacó que, aunque el panorama es complicado, hay un compromiso firme de seguir adelante en la búsqueda de la paz.
