La selección peruana de fútbol se encuentra en la cuerda floja en las Eliminatorias Sudamericanas 2026, y su entrenador interino, Óscar Ibañez, está listo para presentar su última lista oficial de convocados. Enfrentará desafíos mayúsculos el 4 de septiembre contra Uruguay en el estadio Centenario y el 9 de septiembre ante Paraguay en el estadio Nacional, partidos que prometen ser de alta exigencia.
A pesar de que aún hay matemáticas que sostienen la esperanza, la realidad es que las probabilidades de que Perú logre el último boleto del repechaje son casi nulas. El proceso ha estado marcado por constantes caídas y decisiones cuestionables, lo que ha llevado a la llegada de tres entrenadores en busca de revertir la situación.
Convocados y ausencias significativas
La lista de convocados, que será revelada tras la finalización del clásico de la Liga 1, podría tener novedades significativas. Uno de los nombres que destaca es el de Alex Valera, quien podría ocupar el lugar de Paolo Guerrero, ausente por lesión. Valera ha mantenido conversaciones con Ibañez y está a la espera de su llamado tras haber formado parte de las convocatorias iniciales.
Otro jugador que podría regresar es el experimentado Yoshimar Yotún, quien ha estado fuera de la selección por casi dos años debido a una severa lesión en la rodilla. Su rendimiento reciente con Sporting Cristal lo ha colocado nuevamente en la mira del cuerpo técnico.
Además, Joao Grimaldo, que ha brillado en el Riga FC, es otro candidato para la convocatoria, lo que refleja la búsqueda de Ibañez por observar a nuevos talentos en un momento crítico.
Un camino complicado hacia el Mundial
La situación de la selección peruana es preocupante. Con tan solo 12 puntos en su haber y un inicio desastroso que incluyó cuatro derrotas y dos empates en las primeras seis fechas, la esperanza de clasificación se desvanece rápidamente. La dirección de Juan Reynoso fue objeto de críticas por la falta de efectividad en el ataque, lo que llevó a su destitución.
La llegada de Jorge Fossati como su reemplazo no logró enderezar el rumbo, y aunque hubo una ligera mejora en las estadísticas, su enfoque fue debatido y finalmente también resultó insuficiente. En este contexto, Ibañez se enfrenta a la tarea de cumplir con el calendario y dejar una última impresión positiva en los partidos restantes.
Con un proceso lleno de altibajos y expectativas cada vez más bajas, la selección peruana de fútbol se prepara para afrontar sus últimos desafíos en las Eliminatorias, esperando que estos encuentros puedan servir como base para el futuro del equipo.
