La Administración del Seguro Social de los Estados Unidos ha anunciado un incremento del 2,8% en los beneficios para jubilados y personas con discapacidad, que entrará en vigor en enero de 2026. Este ajuste, que se traduce en un aumento promedio de más de 56 dólares mensuales, afectará a casi 71 millones de beneficiarios.
El anuncio, esperado para la semana pasada, se retrasó debido al cierre del gobierno federal. El ajuste por costo de vida se financia mediante impuestos sobre la nómina que aportan trabajadores y empleadores, y se prevé que el límite salarial para estos impuestos aumente a 184.500 dólares en 2026, en comparación con 176.100 dólares en 2025.
En 2025, los beneficiarios ya habían recibido un aumento del 2,5% y, en 2024, se otorgó un incremento del 3,2%. El notable aumento del 8,7% en 2023 fue impulsado por una inflación récord, pero el ajuste para 2026 refleja un contexto de inflación más moderada. La agencia comunicará a los beneficiarios sus nuevos montos de beneficio a principios de diciembre.
Las reacciones de los beneficiarios han sido diversas. Algunos adultos mayores, como Linda Deas, de 80 años, residente de Florence, Carolina del Sur, expresan que este ajuste no será suficiente para cubrir sus gastos diarios. Deas, que se mudó a Carolina del Sur desde Nueva York en 2022, ha visto un aumento de 400 dólares en su alquiler en los últimos dos años y menciona que los precios de productos básicos, como el seguro de automóvil y la comida, también han subido. “Si has estado en los supermercados últimamente, notarás cómo los precios están subiendo, no bajando”, comentó.
































































