Una joven colombiana de 22 años, identificada como Yesica Cruz Capera, fue víctima de un atroz intento de asesinato en un hotel de Neiva el pasado 23 de agosto, tras haber sido engañada por una falsa oferta de trabajo. La gravedad del caso radica en que la agresora, quien aparentemente intentó robarle a su bebé, quedó en libertad, generando indignación en la comunidad.
El engaño que desencadenó la tragedia
Los acontecimientos comenzaron semanas antes cuando Yesica fue contactada a través de redes sociales por Sara Lucía Vásquez Ortega, quien se presentó como embajadora de una fundación dedicada a ayudar a mujeres embarazadas en situación vulnerable. Según el relato de Yesica, Lucía le ofreció un trabajo como modelo en un evento de la fundación, que tendría lugar en un centro comercial en Neiva.
Con la promesa de ser maquillada para el evento, Yesica fue llevada a un hotel. Una vez allí, la mujer le ofreció un café, en el cual la joven sospecha que le puso alguna sustancia para adormecerla. “Me pidió que no abriera los ojos mientras me maquillaba”, explicó Yesica, quien fue acuchillada en el cuello en ese momento, lo que desató una lucha desesperada por su vida.
La lucha por sobrevivir y la respuesta de las autoridades
Logrando desarmar a su agresora tras una feroz pelea, Yesica salió del hotel con el cuello herido y un cuchillo en mano, buscando ayuda en la calle. Sin embargo, la situación se complicó, ya que la gente que la veía ensangrentada dudaba en ayudarla. Finalmente, un hombre se acercó y, tras pedirle que dejara el cuchillo, contactó a la policía y servicios de emergencia.
Una vez que llegaron las autoridades, Yesica notó irregularidades en el proceso; a pesar de que explicó lo sucedido, los hechos fueron registrados como una simple riña, lo que permitió que la agresora quedara en libertad. Mientras tanto, Yesica fue trasladada a un hospital donde se recupera satisfactoriamente, aunque con un sentimiento de injusticia. “Me siento muy mal, me pregunto por qué la van a dejar en libertad”, expresó.
La joven denunció que entre las pertenencias de su agresora encontraron herramientas quirúrgicas, lo que respalda su sospecha de que el ataque fue premeditado con la intención de robarle a su bebé. “Eso implica que se quería robar a mi bebé, ella me marcaba la barriga como si midiera algo”, comentó, exigiendo justicia y una investigación exhaustiva.
Hasta el momento, la Fiscalía General de Colombia no ha emitido información oficial sobre el caso. Sin embargo, las autoridades municipales de Neiva han lamentado lo sucedido y prometieron brindar apoyo jurídico a Yesica para que su caso no quede impune.
