El Consejo de Seguridad de la ONU decidió el sábado reimponer sanciones a Irán debido a su falta de cooperación con el OIEA. Esta medida entrará en vigor a las 00:00 GMT de este sábado, tras haber rechazado una propuesta de prórroga de seis meses presentada por Rusia y China.
La votación resultó con nueve votos en contra, cuatro a favor y dos abstenciones, lo que permitió restablecer las sanciones que habían sido levantadas en 2015. Francia, Alemania y Reino Unido instaron a Irán a proporcionar acceso total a los inspectores del OIEA, reiniciar las negociaciones nucleares y ofrecer mayor transparencia respecto al uranio enriquecido.
El ministro de Exteriores iraní, Abás Araqchi, describió la votación como “una oportunidad fugaz para decir sí a la cooperación”. Sin embargo, diplomáticos europeos informaron que no se observaron gestos concretos por parte de Irán que pudieran prevenir la imposición de sanciones, como la reanudación de diálogos con Estados Unidos o el acceso a instalaciones sensibles como Natanz, Fordo e Isfahan.
Según expertos europeos, Irán posee alrededor de 450 kilos de uranio enriquecido al 60%, cantidad suficiente para fabricar entre 8 y 10 bombas nucleares. A pesar de estas preocupaciones, el presidente iraní, Masoud Pezeshkian, afirmó ante la ONU que Irán “nunca ha buscado ni buscará jamás fabricar una bomba atómica”.
En este contexto, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, solicitó que se mantenga la vigilancia internacional sobre el programa nuclear iraní. Tanto Estados Unidos como Israel consideran que Teherán podría estar intentando desarrollar armas nucleares, mientras que el OIEA, liderado por Rafael Grossi, intenta mediar en la situación sin obtener resultados significativos.
Por su parte, el líder supremo iraní, ayatolá Ali Jamenei, reafirmó que Irán no cederá en su programa de enriquecimiento de uranio, a pesar de que la administración estadounidense busca una renuncia total a estas actividades, mucho más allá del límite del 3.67% establecido en el acuerdo nuclear de 2015.
En la Asamblea General de la ONU, México hizo un llamado para frenar la proliferación de armas y reforzar el multilateralismo, enfatizando la importancia de garantizar la seguridad y la paz global. El canciller Juan Ramón de la Fuente, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), reiteró esta posición el pasado viernes.
