CIUDAD DE MÉXICO.— Un total de 78 mexicanos permanecen detenidos en el controvertido centro de detención conocido como “Alligator Alcatraz”, donde el consulado mexicano asegura que se encuentran en condiciones aceptables. Rutilio Escandón, cónsul de México en Miami, realizó una visita al centro, donde se entrevistó con 14 connacionales y confirmó que están bien atendidos, subrayando la importancia de respetar sus derechos humanos.
Condiciones de detención y asistencia legal
Durante su visita, Escandón destacó que los detenidos han expresado sus necesidades y que su situación no es tan precaria como algunos informes sugieren. Sin embargo, su colega, Juan Sabines, cónsul en Orlando, señaló que en otro centro de detención en Baker, el número de mexicanos ha disminuido. “La mayoría ya fue repatriada o está en ruta de retorno”, indicó, añadiendo que el 90% optó por la “salida voluntaria” de Estados Unidos.
Sabines también informó que la mayoría de los detenidos enfrenta cargos menores relacionados con infracciones de tránsito. “Ninguna cárcel es digna ni adecuada para personas inocentes. Ser migrante NO es un delito”, enfatizó, dejando en claro su postura sobre la situación de estos connacionales.
Controversia y legalidad del centro
A pesar de los comentarios positivos de Escandón, “Alligator Alcatraz” sigue siendo objeto de críticas por su rápida construcción, que tomó aproximadamente nueve días, y las condiciones que podrían considerarse inhumanas. La jueza federal de Estados Unidos, Kathleen Williams, ordenó recientemente el desmantelamiento del centro en un plazo de 60 días, además de prohibir la entrada de nuevos migrantes.
Las afirmaciones de Escandón sobre la seguridad de los detenidos contrastan con la percepción pública de que el centro ha sido utilizado con fines políticos, lo que genera más cuestionamientos sobre su funcionamiento y la protección de los derechos humanos de los migrantes. “No son delincuentes, son personas que vienen a trabajar aquí en los Estados Unidos”, concluyó el cónsul, defendiendo la necesidad de una atención más digna y humana para los migrantes.
