El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha manifestado este domingo su deseo de que las conversaciones sobre el Nuevo Tratado de Reducción de Armas Estratégicas, conocido como Nuevo START, incluyan también los arsenales nucleares de Reino Unido y Francia. Estas declaraciones surgen en el contexto de la propuesta rusa para extender por un año los límites al armamento nuclear, que caducará en febrero de 2026, bajo la condición de que Washington realice una acción similar.
Peskov señaló que “las negociaciones deberían iniciarse a nivel bilateral” ya que el Tratado START es un acuerdo entre dos partes. Sin embargo, agregó que no se puede ignorar la existencia de los arsenales británico y francés, ya que son parte integral del problema de la seguridad global en Europa y de la estabilidad estratégica.
En una reunión reciente con miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, el presidente ruso, Vladimir Putin, expresó su disposición para extender el Nuevo START por un año, siempre que Estados Unidos actúe de manera equivalente y evite acciones que puedan alterar el equilibrio existente en materia de armamento. No obstante, Putin instó a las instituciones pertinentes a que mantengan una vigilancia constante sobre las acciones de Estados Unidos, en particular en lo que respecta a su arsenal de armas ofensivas estratégicas.
A principios de febrero de 2023, Rusia suspendió su participación en el tratado, que fue firmado en 2010 por los entonces presidentes de Estados Unidos y Rusia, Barack Obama y Dimitri Medvedev, respectivamente. Este acuerdo se estableció con el fin de reducir y controlar las armas nucleares entre las potencias que alguna vez fueron rivales durante la Guerra Fría. A pesar de la suspensión, Moscú no ha formalizado su salida del tratado, el cual tiene una vigencia que finalizará en febrero de 2026.